El experto dijo que uno de los principales motivos detrás de este crecimiento es la evolución en la aceptación de las personas hacia la terapia psicológica, pues hace algunas décadas, acudir a un psicólogo era visto con estigma y prejuicio, asociado erróneamente con la idea de "estar loco", sin embargo, en la actualidad cada vez más individuos reconocen la importancia de cuidar su salud mental, y ven la terapia como una herramienta valiosa para abordar sus preocupaciones emocionales.

Este cambio de percepción, dijo, ha generado una mayor demanda de servicios psicológicos, lo que se traduce en un aumento en el número de pacientes que buscan ayuda profesional. Como resultado, los psicoterapeutas han experimentado un incremento en su carga de trabajo y una mayor necesidad de estar preparados para enfrentar una variedad de trastornos y problemáticas psicológicas.

Mencionó además que otro factor que ha contribuido al aumento en la demanda de psicoterapeutas es la ampliación de la oferta de servicios psicológicos dirigidos a niños y adolescentes, pues anteriormente la terapia psicológica estaba dirigida principalmente a adultos, pero ahora hay una mayor conciencia sobre la importancia de abordar los problemas de salud mental desde edades tempranas.

Esto ha llevado a la normalización de la terapia psicológica en la infancia y la adolescencia, creando una demanda adicional de psicoterapeutas especializados en estas poblaciones.

En este contexto de creciente demanda, los psicólogos deben asegurarse de contar con una formación continua y actualizada incluso después de salir de la universidad. Según Pena, la formación universitaria puede no proporcionar un conocimiento práctico suficiente sobre técnicas de terapia y tratamiento de trastornos específicos. Por lo tanto, es fundamental que los psicólogos busquen oportunidades de formación complementaria y se mantengan al día con los avances en el campo de la psicología clínica.

El Diplomado en Psicoterapia del Instituto de Humanidades y Ciencias de la Conducta ofrece una oportunidad accesible para egresados de Psicología que desean enfocar su práctica profesional al trabajo clínico, pues pone en contacto a los estudiantes con profesionales de la salud mental con años de experiencia.