La Jefa de Epidemiología y Coordinadora de Programas Prioritarios del Instituto, Angélica Pon Méndez, destacó que el suicidio es una de las grandes causas de muerte temprana prevenible.

Indicó que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, en el mundo cada día se registran casi 3 personas que ponen fin a su vida; asimismo, señaló que al menos 20 personas intentan suicidarse por cada una que lo consigue.

La funcionaria expresó que para ISSSTECALI el bienestar de sus derechohabientes es la prioridad y destacó que la integridad mental favorece una estrategia de integración y productividad que equivale a una vida plena.

“Nuestra Institución cuenta con áreas de psicología y psiquiatría que otorgan una atención cálida, humana y discreta para apoyar a quienes lo requieran”, informó Pon Méndez, quien hizo hincapié en que el comportamiento suicida viene determinado por un gran número de causas complejas, como el desempleo, la pérdida de seres queridos, una discusión y la ruptura de relaciones.

Otras influencias, dijo, pueden ser el abuso de alcohol y estupefacientes, los maltratos en la infancia, el aislamiento social y determinados trastornos mentales como la depresión y la esquizofrenia. Las enfermedades orgánicas y el dolor discapacitante también pueden incrementar el riesgo de suicidio.

Por lo anterior, Angélica Pon exhortó a cuidar la salud mental estar atentos a consultar al médico cuando se detecte en un familiar o amigo los siguientes signos de alarma:

• Dejar de jugar, estudiar o trabajar (pérdida de interés en las actividades habituales).

• Regalar o deshacerse de sus objetos favoritos.

• Cambios de conducta drásticos.

• Pasar la mayoría del tiempo solo (retraimiento social, alejamiento o huidas).

• Alteraciones crónicas del sueño.

• Llamar la atención negativamente (manifestaciones emocionales contenidas).

• Cambios en los hábitos alimenticios.

• Uso de alcohol y/o drogas.

• Exponerse a situaciones de riesgo innecesarios.

Señaló que tener una alta autoestima y fomentar relaciones sociales íntegras con la familia, los amigos y en el ámbito laboral, así como una relación estable de pareja y las creencias religiosas o espirituales, sin fanatismo, son factores muy importantes que favorecen la salud mental.

La funcionaria manifestó que cada suicidio supone la devastación emocional, social y económica de familiares y amigos, por lo que exhortó a romper el prejuicio contra la atención de problemas psicológicos y mentales, “la pronta identificación y el tratamiento adecuado de los trastornos mentales son una importante estrategia preventiva”, concluyó Angélica Pon Méndez.