En abril, dos jóvenes asesinaron a un taxista cuando éste se resistió a un asalto en plena madrugada. Este homicidio despertó la inquietud del gremio quienes denunciaron que con frecuencia son blancos de delincuencia.

El subprocurador de Justicia del Estado, Marco Antonio Chavarría López, mencionó que la intención es prevenir que los choferes sean víctimas de robo con violencia, por lo que homologarán medidas de reacción ante una situación de riesgo.

Como parte de los trabajos previos, se llevó a cabo la última reunión de seguimiento, en las oficinas de la subprocuraduría, con el objetivo de analizar cada una de las propuestas y que formarán parte del protocolo.

“Con una capacitación para todos los miembros de cada uno de los gremios, con el propósito de que conocieran cuál era la problemática que estaba surgiendo. De ahí salieron ideas sobre cuáles eran algunas de las soluciones que se estaban planteando, en estas capacitaciones también se originaron temas sobre cómo funcionan los botones de alerta que la secretaría de seguridad pública tiene, a través del centro de control y comando”, indicó el funcionario estatal.

Algunas de las opciones sugeridas por el director de Seguridad Pública Municipal (DSPM), Eduardo Hernández Vélez, son equipar con GPS a los conductores para su rápida localización, poner letras reflejantes en la unidad, que instalen botón de pánico en teléfonos celular y dividan el interior de las unidades con mallas protectoras.

“Nosotros les pedimos, que así como nos exigen ustedes también ustedes protéjanse, inviertan poquito en seguridad, cuánto pueden gastar en ponerles cámaras a los taxis o GPS. Es una opción para que tengan mejor seguridad”, sugirió el director.

Para formalizar las medidas, la Procuraduría General de Justicia del Estado, trabaja en coordinación con la DSPM, Unidad Municipal de Transporte (UTM) y líderes de los gremios de taxistas.