Las cuadrillas arribaron a Baja California para reforzar la seguridad que tanto demanda la sociedad, pero el gobierno federal pidió fiado.

El alcalde Marco Novelo Osuna, quien también es empresario hotelero, comentó que es complicado encontrar asilo para policías sobre todo en un destino turístico que apenas se sostiene.

La propuesta que hizo el director de Seguridad Pública, Emilio Camarena Castillo, fue que en cada habitación se hospedaran cuatro personas, sin embargo al no haber acuerdo con los hoteleros el presidente municipal consideró la opción de rentar viviendas para los gendarmes.

El presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles, Victor Celis Dueñas, mencionó que tras una reunión en agosto con autoridades del puerto lograron que un par de hoteles accediera, no solo a hospedarlos sino a darles descuento pero a cambio exigieron un pago por adelantado.

Ante la negativa de la Policía Federal de pagar, el resto de los empresarios cerraron las puertas a la negociación pues tener un huesped con estas características, además de los servicios básicos que demandan como limpieza y productos de higiene, requieren de tres comidas al día.

Celis Dueñas mencionó que para los hoteleros de Ensenada los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre, son buenos para el sector por lo que no pueden dar crédito, pero además no hay garantía de que paguen y tienen fama de "mala paga".