Guadalupe Marmolejo Ferrel, director de Bomberos, mencionó que es vital tener en cuenta lo que marca NOM 011/1-SEDG-1999, como es que las compañías gaseras deben cumplir entregando tanques en buenas condiciones, sin abolladuras o grietas, sin reparaciones ajenas, ni soldaduras o hechizos.

Tampoco deben presentar una base deforme o corroída y el material debe estar en buen estado, en tanto que la parte de la llave del tanque debe estar sellada al momento de adquirir el tanque con los camiones de gas.

Destacó que es necesario que un experto se encargue de revisar las instalaciones de gas para detectar alguna fuga y solucionarlo en el momento para evitar accidentes de cualquier nivel de peligrosidad.

“Debemos tener claro que las fugas de gas no son cuestiones que hay que dejar pasar, sino arreglarlas de inmediato para no correr ningún riesgo en casa o negocio”.

Algunos de los síntomas que ocasiona respirar gas LP son: dolor de cabeza, mareo, náusea, vómito, dificultad respiratoria, somnolencia, desorientación y en casos extremos convulsiones, inconsciencia y la muerte.

En caso de hacer contacto con los ojos causa congelamiento, hinchazón y daño ocular, incluso quemaduras en frío.

¿Qué hacer en caso de una fuga?

• Repórtelo de inmediato a Bomberos, Protección Civil o Cruz Roja

• Aplica agua y jabón en llaves y tuberías para verificar las áreas de fuga

• Si las llaves, tuberías o instalaciones están dañadas mande repararlo con un experto

• No encienda cerillos, cigarros o cualquier otro artefacto de fuego

• Abra puertas y ventanas para ventilar en área, pero no prenda la luz o algo eléctrico

• Cierre la llave de paso del cilindro de gas

• Evacúe el área de manera precautoria