El comandante de La Misión, explicó que el 31 de julio, les reportaron el hallazgo de una caja de color café de madera con una moldura en forma de Ángel a la orilla de la carretera.

La pieza de madera estaba junto a un árbol semioculto por una tabla y al revisar la caja los agentes notaron que era una urna para cremación y que dentro tenía arena o cenizas.

Se dio aviso a la Policía Ministerial, acordonaron el sitio y ministeriales explicaron que no había delito alguno en este asunto.

Algunos agentes compartieron el caso en redes sociales sin respuestas y solo confirmaron que es una urna crematoria que contiene las cenizas de un niño o una niña.

Una de las hipótesis que ellos tienen es la posibilidad de que esta urna la hayan robado en alguna casa en algún punto del Estado y al darse cuenta que no contenía joyas y contenía cenizas decidieron abandonarlo en el lugar donde fue hallado.

Además confirmaron que no existía ninguna denuncia de robo de alguna urna de cremación en los alrededores aunque los policías municipales estuvieron pendientes en días subsecuentes de un reporte con estas características en ranchos y comunidades pero no se dio.

Ante esto decidieron buscar el apoyo de alguna iglesia para un depósito final sin éxito, en varias semanas hasta que finalmente una de las oficiales obtuvo el auxilio de la iglesia de la Inmaculada Concepción de Maneadero para una misa y que los restos tengan sepultura.

El próximo domingo de no aparecer alguien que reclame como familiar dicha urna, se realizará una misa de las 9:30 de la mañana en dicha iglesia y se sepultarán las cenizas de quienes llaman ya los oficiales Ángel Guadalupe.