Una caída superior al 50% de pasaje es el que enfrentan desde hace tres semanas los taxistas de la localidad, debido a la contingencia sanitaria.
Fuera de los mercados es donde hay más demanda de servicios explicó Javier Mendiola Ramírez, quien conduce el taxi 393 de la línea Naranja y Blanco.
Es mucha la gente que ha dejado de salir, empleados y clientes de la zona centro que tuvieron que descansar y hasta hace unas semanas usaban los servicios de los taxistas.
Explicó que son las mismas horas de trabajo pero agarrando muy poco dinero, “Es la misma gente, sobre todo del mercado, ocupan llevar su mandado”.
Pero el procedimiento es distinto y tardado ya que igual que los demás cumplen con reglas sanitarias no solo por el cliente sino por la propia seguridad.
Cuando dan un servicio, al terminarlo tienen que desinfectar el vehículo, es limpieza por fuera y por dentro, se desinfecta por seguridad
Explica que lo hacen por los clientes pero también por protección personal, porque el riesgo está latente.
Son los mismos taxistas quienes compran los productos para sanitizar sus vehículos no lo hace la empresa para la que trabajan.
Explicó que la mayoría trae cubrebocas, aunque muchos solo la utilizan cuando llevan un pasajero.