Comerciantes de la calle Primera venden fotografías con la imagen del derrumbe de un tramo de la carretera escénica Tijuana-Ensenada, que desde el día del colapso se convirtió un souvenir buscado por los visitantes extranjeros.
El costo de la fotografía va de los 50 a los 120 pesos, según refirió el propietario de un antiguo negocio de la zona turística que vio en el hundimiento de la carretera una forma de hacer dinero.
Además de que compran una o varias imágenes del colapso, los visitantes aprovechan para conocer los pormenores de la obra de construcción que se lleva a cabo en el kilómetro 93+500 de la autopista, y despejar dudas sobre los accesos a la ciudad.
El collage de fotografías está compuesta por imágenes de diferentes fotógrafos que estuvieron la mañana del sábado 28 de diciembre en el lugar del hundimiento.