Así lo informó el secretario de Salud, Alonso Óscar Pérez Rico, quien detalló que la citada investigación arrojó que más de 200 personas fueron afectadas por procedimientos estéticos invasivos con un producto denominado “Probcel”, un relleno facial que contiene ácido Hialurónico, colágeno y elastina.

Especificó que el establecimiento inspeccionado por COEPRIS, no exhibe documentación técnica-legal que acredite como profesional de salud al personal que trabaja en el sitio; además el producto en mención no es avalado por la FDA (Administración de Medicamentos y Alimentos) y la dependencia estatal.

“Derivado de esto, todos los salones de belleza y spas, donde se realizaban estos procedimientos serán verificados por la Comisión Estatal de Riesgos Sanitarios y, si es necesario, vamos a mandar divisiones de Tijuana, Ensenada. Se revisará el 100% de los establecimientos que se prestaron a este tipo de escenarios”, advirtió el Dr. Pérez Rico.

Informó que durante la verificación al inmueble reportado, que ilegalmente ofrecía servicios de salud, detectaron la falta de un aviso de funcionamiento o responsable sanitario, no tiene expedientes clínicos ni manuales de procedimientos y, no cuenta con plan de manejo de residuos peligrosos biológicos infecciosos, entre otras.

Por lo anterior, el titular de Salud de Baja California abundó que, resultado de esa inspección, procedieron a la suspensión total de trabajos y servicios del establecimiento, integrando un expediente jurídico a disposición de cualquier autoridad.

Con respecto al seguimiento de esta investigación, el secretario de Salud del Estado añadió que, realizarán verificaciones sanitarias continuas a todos los establecimientos que realicen procedimientos estéticos.