La temporada de calor no debe ser motivo para modificar radicalmente los hábitos alimenticios, ya que lo importante es conocer las medidas preventivas para evitar deshidratación e infecciones gastrointestinales, enfermedades típicas de primavera y verano en nuestra región.
La doctora Fabiola Macías Corona, directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 17 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Rosarito, explicó que en esta época del año es recomendable consumir frutas y verduras, combinadas con otros alimentos.
“La idea es comer más fresco y ligero para contrarrestar las consecuencias que las altas temperaturas provocan en el organismo”.
Indicó que existen recomendaciones sencillas y muy precisas que resultan de gran utilidad para alimentarse adecuadamente en estas semanas en que el termómetro supera con frecuencia los 40 grados centígrados en Baja California.
Las frutas y verduras, indicó, son la mejor opción por su elevado contenido en agua, fibra, vitaminas y otros nutrientes, se convierten en los alimentos más adecuados para el verano.
Además, dijo, incluyendo frutas y verduras en la comida se le devuelve al cuerpo un buen nivel de líquidos que ayudan a evitar la deshidratación. “En la época de calor el organismo requiere menos calorías, a diferencia del invierno en que se requiere mantener lo más posible la temperatura corporal, es decir; se debe reducir el consumo de aquellos alimentos que contribuyan a aumentar las calorías y el peso” agregó.
El consumo de líquidos debe ser prioritario. Sin embargo, se deben evitar refrescos y bebidas alcohólicas como cerveza o cocteles.