La vaquita marina, tiburones, abulón, langosta, siemprevivas, cientos de especies nativas de flora y fauna además de las áreas naturales protegidas son algunas de las afectaciones que tendrían los municipios de Ensenada, Rosarito, San Quintín y las Islas del Pacífico y el Golfo de California con esta disposición.

Desde las oficinas centrales en la Ciudad de México, la Dra. Blanca Alicia Mendoza Vera, Titular de la PROFEPA decidió cerrar a partir del 30 de Julio las oficinas de la PROFEPA en Ensenada, Baja California.

El anuncio, fue con un breve telefonazo en donde se informó a los cuatro servidores públicos que sobreviven en las oficinas a los cuales desde hace tres años les han recortado paulatinamente los recursos técnicos y económicos necesarios para atender las cientos de denuncias de problemáticas ambientales que van desde varamientos de mamíferos marinos y terrestres hasta el tráfico ilegal de flora y fauna.

Ante esta situación las organizaciones no gubernamentales y ambientalistas iniciaron una campaña que pretende mediante la recopilación de firmas ratificar la importancia de la PROFEPA en Ensenada y hacer un llamado al gobierno central sobre el impacto que podría tener este cierre en la región.

En la región especies como la vaquita marina, totoaba, tortugas marinas están sujetas a protección especial y la única entidad que puede aplicar y aplica sanciones es PROFEPA.

Actualmente aunque la Semar y guardia nacional coadyuvan en la vigilancia, legalmente carecen de atribuciones para sancionar.

Este es el documento de change.org para reunir firmas en contra de ésta decisión:

Desde la Ciudad de México, la Dra. Blanca Alicia Mendoza Vera, Titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) sin razonamiento, análisis ni consideración al medio ambiente y los recursos naturales de Baja California, decidió cerrar a partir del 30 de Julio las oficinas de la PROFEPA en Ensenada, B.C.

La PROFEPA ha mantenido permanencia en la ciudad de Ensenada, desde hace más de 25 años, ante la necesidad de estratégicamente cubrir y atender la problemática ambiental de la región, ya que cuenta con importantes áreas naturales protegidas y un extenso territorio terrestre y marino que proteger. Antes de la creación de San Quintín como municipio, Ensenada, B.C era el municipio territorialmente de mayor extensión territorial en nuestro País y el segundo más grande de América Latina con una gran riqueza natural, esta superficie abarca 51,952 kilómetros cuadrados, que sin importar la delimitación actual y desde 2020 en el que se decretó a San Quintín como municipio, sigue correspondiendo la inspección y vigilancia al escaso personal adscrito a la PROFEPA en Ensenada, B.C. sin dejar de mencionar las aguas del pacifico y golfo de california.

Ha padecido severos recortes presupuestales en gastos de operación a lo largo de los últimos años, agravándose en la actual administración bajo la política de “austeridad” que ha llegado al punto de inoperatividad, al carecer de recursos para combustible, pago de derechos de oficinas, suficientes vehículos adecuados para campo, reparación de los pocos e inservibles vehículos, viáticos para que servidores públicos puedan implementar operativos para atacar problemáticas ambientales de la entidad, entre otros. Sabiendo que, en muchas ocasiones los servidores públicos han tenido que utilizar sus propios medios (vehículos y sueldo) para poder atender reportes y denuncias ciudadanas.

Actualmente cuenta sólo con 04 servidores públicos para abarcar y atender problemáticas y contingencias ambientales, a quienes se les reconoce por su compromiso y vocación hacia la protección de nuestros recursos naturales. Realizando también acciones de inspección y vigilancia para actuar y prevenir actividades ilícitas (irregularidades y delitos) ambientales en los municipios de Ensenada y San Quintín, incluyendo las 08 Áreas Naturales Protegidas que son: RB Islas del Pacifico de la Península de Baja California, PN Constitución de 1857, PN Sierra San Pedro Mártir, APFF Valle de los Cirios, APFF Islas del Golfo de California, RB Bahía de los Ángeles, Canales de Ballenas y de Salsipuedes, PN Zona Marina archipiélago de San Lorenzo y RB Isla Guadalupe.

La PROFEPA en Ensenada, B.C. a la medida de sus recursos humanos, materiales y económicos hace todo lo posible para atender denuncias ciudadanas, realizar acciones operativas de inspección y vigilancia en la Zona Federal Marítimo Terrestre, Playas, Terrenos Ganados al Mar a lo largo de la costa de todo el Pacifico y Golfo de California. Se atiende también temas de nuestra Vida Silvestre que incluyen todas las especies en Peligro de Extinción, Amenazadas y Sujetas a Protección Especial, desde reportes ciudadanos relacionados a varamientos de mamíferos marinos (muertos o vivos), aves, mamíferos terrestres, etc. Operativos de inspección y vigilancia para combatir el aprovechamiento (Ej. Pepino de Mar, Totoaba, Almeja Pismo, flora y fauna), transporte, comercialización y tráfico ilegal de la misma, cacería furtiva de borrego cimarrón, venado, etc. Se encarga de inspeccionar obras y actividades que requieren autorización de Impacto Ambiental de la federación (Piedra Bola de Mar, Aprovechamiento de arenas en cauces, minería, entre muchas más), así como atender temas de ilícitos Forestales (Palmilla, Salvia, tala ilegal, cambios de uso de suelo, saneamientos forestales, centros de almacenamiento y transformación de materias primas forestales, investigación de incendios, etc.). Sin pasar por alto los Comités de Vigilancia Ambiental Participativa que integra, capacita y acredita para trabajar de forma conjunta con la ciudadanía en la protección de los recursos naturales.

En los últimos días se ha confirmado que desde las oficinas centrales de la PROFEPA en la Ciudad de México se decidió desaparecer las oficinas de esta institución que han operado por más de 25 años en la ciudad de Ensenada, B.C. por falta de presupuesto para realizar el pago de derechos ante el mismo gobierno federal para mantener sus oficinas en esta importante región. Se pretende que el escaso e insuficiente personal será movilizado a la ciudad de Mexicali, B.C. quienes para atender alguna contingencia, reporte o denuncia, deberán de trasladarse (si se cuenta con recurso de combustible y viáticos) hasta la ciudad de Ensenada o San Quintín (incluyendo el sur profundo), es decir, para atender, valorar, reubicar y canalizar algún ejemplar de vida silvestre lastimado, herido o que pone en riesgo a la población se tendrá que esperar a los trámites burocráticos, sin dejar de mencionar que se tardarían días o hasta semanas en atender emergencias ambientales. Esto, además de dejar vulnerables nuestros recursos naturales en nuestra región, aumentaría el gasto al erario ya que lo que hoy no requiere gastos de viáticos, aun con el escaso personal, así como se prevé el requerimiento de más combustibles para dicha movilización. Si el gobierno federal cumple su amenaza de desaparecer a la PROFEPA en Ensenada, B.C. se estaría atentando gravemente contra de nuestros importantes recursos naturales.

Además del perjuicio ambiental e irreparable que esta pésima decisión puede desencadenar, traerá serias afectaciones a la economía de permisionarios, consultores, gestores, familias que deben de realizar trámites desde el paralelo 28 (limite con el estado de Baja California Sur) hasta la ciudad de Ensenada, B.C. que a partir del 1 de Agosto, tendrían que trasladarse a la ciudad de Mexicali, B.C. para presentar sus cumplimientos y gestiones necesarias. Esto, requerirá de por lo menos 3 horas más de traslado terrestre, gastos de combustible, peajes y alimentación.

Un verdadero bienestar, va de la mano con la protección de nuestro medio ambiente y recursos naturales. La política de austeridad debe estar debidamente enfocada, no al grado de afectar nuestro medio ambiente y dejar a la PROFEPA (autoridad federal encargada de vigilar y proteger nuestro medio ambiente) al grado de la inoperancia.

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