Para celebrar las diferentes décadas musicales, el Gobierno Municipal encabezará la organización del Carnaval de Ensenada 2023, el cual se realizará del 16 al 21 de febrero, informó Armando Ayala Robles, presidente municipal de Ensenada.
El primer edil adelantó que la intención es darle a las celebraciones carnestolendas un toque peculiar a las distintas épocas, ya que cada una ha marcado de manera distinta a las personas, tanto con la música, como con la moda, las tradiciones y las características de cada una.
“Será muy positivo y divertido para quienes participen en el desfile, ya sea en comparsas, en los diversos templetes y carros alegóricos”, expresó el presidente de Ensenada.
Para ello, refirió que la idea es que para esa fecha quede concluida la primera etapa de rehabilitación de la avenida Juárez, sobre todo en las inmediaciones del Parque Revolución, ya que ese fue el compromiso de la empresa contratada para las obras.
“De acuerdo a lo estipulado por la empresa, serían siete semanas; esperemos cumplan con los tiempos. Entendemos que puede haber lluvias y retrasos, pero al menos el primer tramo de avenida Moctezuma hacia la Ruiz debe estar terminado”, estimó.
Ayala Robles informó además que todo lo relacionado a la imagen, la temática, el programa y la zona de festejos del Carnaval de Ensenada se dará a conocer el jueves 12 de enero.
Otro detalle del carnaval de este año, agregó el munícipe, es que no se tendrá un aforo tumultuoso y se impulsará al sector comercio del centro histórico, las zonas turística y comercial que esté en el área de festejos donde serán colocados los templetes.
“Ya hemos visto que se han desarrollado algunas actividades como Ensenada al Fresco, donde los mismos negocios de la calle Primera sacan mesas y sillas para los comensales, entonces es la idea que planeamos para el Carnaval”, indicó.
El alcalde enfatizó que será un evento familiar y de reactivación económica, sin pretensiones de recaudación para el Gobierno Municipal, sino impulsar al sector comercio y este pueda recuperarse de los remanentes económicos que sigue dejando el “efecto pandemia”.