La reciente imposición de aranceles por parte del presidente Donald Trump ha encendido alarmas en México y Canadá, pues esta decisión podría desencadenar una guerra comercial con efectos negativos para la región, advirtió la CEO de TLC Asociados, Daniella Martínez.
Comentó que tanto los gobiernos de ambos países, evalúan posibles medidas de represalia ante lo que consideran una violación al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ya que aranceles del 25% a productos mexicanos y canadienses, así como el 10% adicional a importaciones chinas, ponen en jaque la estabilidad comercial de América del Norte.
"Estos impuestos representan un golpe directo a sectores estratégicos como la industria automotriz, la manufactura y la agricultura. Las empresas enfrentan un encarecimiento de sus productos y una reducción en su competitividad", señaló.
México, cuyo 83% de exportaciones tiene como destino EE.UU., es uno de los países más afectados, por lo que las empresas con cadenas de suministro interconectadas en la región verán un aumento en costos operativos, lo que podría provocar despidos y reducción de inversiones.
Por su parte, indicó, en EE.UU. los efectos negativos también se harán notar, pues las industrias que dependen de insumos mexicanos, como la automotriz y la manufactura, enfrentarán costos de producción más altos, lo que podría derivar en aumentos de precios para los consumidores.
"Estos aranceles no solo afectan a México y Canadá, sino que también impactarán el bolsillo de los estadounidenses, además existe el riesgo de que compañías extranjeras reconsideren sus planes de inversión en el país debido a la incertidumbre comercial", afirmó.
Daniella Martínez refirió que los gobiernos de México y Canadá han manifestado su rechazo a estas medidas y han comenzado a explorar mecanismos legales dentro del T-MEC para impugnar la decisión.
En caso de que EE.UU. no retroceda, ambos países podrían imponer aranceles en respuesta, afectando exportaciones clave como productos agrícolas estadounidenses, advirtió.
La CEO de TLC Asociados dijo que la imposición de barreras comerciales contradice los principios del T-MEC y podría hacer que México y Canadá busquen diversificar sus socios comerciales, reduciendo su dependencia de la Unión Americana.
En ese sentido, aseguró que esta situación abre la puerta a que México fortalezca su comercio con Asia y Europa, lo que podría alterar el equilibrio comercial en la región", comentó la especialista.
De mantenerse los aranceles, el panorama para 2025 luce complicado, pues algunos analistas estiman que el PIB de México podría caer hasta un 4% si la guerra comercial se prolonga y la depreciación del peso podría compensar parcialmente el impacto, pero el riesgo de una fuga de inversiones y un deterioro del mercado laboral sigue latente, concluyó Daniella Martínez