La llegada de las plataformas electrónicas para redes sociales generaron un efecto curioso, pues en un solo espacio del ahora, iniciaron la convivencia de las relaciones presentes con todos los pasados de cada usuario, expresados en la red de contactos que cada persona anexa a su perfil.

La propuesta de Google Plus, por medio de lo que denominó círculos, apostó por la idea de que cada persona pueda mantener cierto orden al separar en grupos los distintos roles que juega cada usuario: un círculo familiar, otro de amigos, otro de cuestiones laborales... tantos como fuera necesario. Esta forma de organización no ha logrado permear ante el hegemónico Facebook, que en parte debe su éxito a cierta dósis de caos.

Es común que quienes cuentan con un perfil en Facebook, técnicamente mantengan el mismo tipo de enlace con todo tipo de contactos, independientemente de si en la vida real mantienen una convivencia diaria o nunca se han visto en persona.

La complejidad de establecer cierta gradualidad en el tipo de interacciones ha sido leído como un problema cuando se presenta la ruptura en una relación, pues finalmente, ¿cómo se puede atender el hecho de que al menos, de manera virtual, esa persona se encuentre ahí? ¿cómo interactuar con la cantidad de amigos en común que podrían estar compartiendo información que poco o nada ayuda en un rompimiento?

Eliminar al ex al parecer no es suficiente y entonces, la siguiente posible solución es administrarse unas vacaciones de Facebook, pero esto definitivamente no conviene al millonario Zuckerberg, que desde el inicio de su proyecto se ha caracterizado por plantear todos aquellos elementos que fomenten al usuario la necesidad de pertenencia.

La semana pasada trascendió que Facebook ensaya una nueva función denominada "take a break", que estará como opción disponible para aquellos que después de haber expresado tener una relación, deciden cambiar dicho estado.

Kelly Winters, jefa de producto de Facebook, hizo público que se buscará que el usuario pueda gestionar el grado de interacción con las publicaciones de la persona en cuestión: lo que se desea ver de las publicaciones de la otra persona y lo que es conveniente que la ex pareja vea de las propias.

Con esto lo que podemos esperar es que en el proceso de adaptación constante de las redes sociales, cada vez más se busque emular la realidad bajo la apariencia de mejoras de servicio, aunque en el fondo la retención del consumidor sea el objetivo principal.