No habrá marcha atrás. Ni un ápice, ni un centímetro.

La decisión que al cuarto para las doce, casi en posición de fuga, tomó la pasada legislatura local en forma mayoritaria así se quedará. Tal cual.

Quienes creen lo contrario, con toda la pena, viven en la ilusión.

Y no habrá veto por dos simples y llanas razones: el gobernador no quiere y no quiere.

Y no quiere porque no puede vetar algo que validó. Algo que cabildeó. Algo que acordó.

Quienes creen lo contrario, con toda la pena, viven en la ilusión.

Francisco Vega de la Madrid meses atrás, muchos meses atrás, manifestó que lo correcto para sortear el conflicto por los límites territoriales era recurrir a una consulta pública con los residentes de la comunidad de Santa Anita. Que ellos decidieran a que municipio pertenecer.

Sí, así se pronunció el mismísimo gobernador del estado.

Una encuesta publica!

Una encuesta pública que de hacerse su resultado favorecería a una “pertenencia” al municipio de Playas de Rosarito. Era apostarle, pues, a un resultado lógico, casi seguro.

Una encuesta pública porque histórica y jurídicamente, la razón estaba en territorio ensenadense.

Pero la propuesta del gobernador se quedó solo en eso. En mera propuesta.

La otra salida para lograr que Rosarito extendiera sus límites afectando el territorio del municipio de Ensenada, que no fuera una consulta pública, era un fallo legislativo acordado, pactado, negociado. Como el ocurrido antes de fenecer la pasada legislatura.

Un fallo que, por obvias razones, hoy no puede ser vetado.

Quienes creen lo contrario, con toda la pena, viven en la ilusión.

Francisco Vega de la Madrid no ha querido hablar del tema. Tan no ha querido que bajó a casi nivel de cero su presencia en Ensenada tras el polémico fallo legislativo.

Tan no ha querido, que instruyó a Francisco Rueda Gómez, su secretario General de Gobierno, fijar una postura de “respeto” a la decisión tomada por los legisladores salientes. Fue un no adelantado a cualquier petición de veto.

Y así se mantendrá.

Hace días el cabildo en pleno de Ensenada acordó solicitar al gobernador del estado veta el dictamen dado por 20 diputados salientes.

Días después, las organizaciones y cámaras agrupadas en el Consejo Coordinador Empresarial, firmaron un desplegado donde demandan lo mismo.

Hasta hoy, las respuestas no han llegado.

Y si llegan, es obvio pensar porque rumbo vendrán.

Quienes creen lo contrario, con toda la pena, viven en la ilusión.

Ojalá me equivoque. Ojalá.