Apenas días atrás, de acuerdo a fuentes dignas de crédito, Enrique Pelayo Torres cuestionó a Marco Antonio Novelo Osuna, alcalde local, sobre el nombramiento de Iván Alonso Barbosa Ochoa como secretario general del XXII Ayuntamiento.
Las fuentes indicaron que Pelayo Torres preguntó a Novelo si Jorge Hank Rhon, el empresario ligado a casas de apuesta en varios estados del país y uno de los hombres más influyentes en el priismo bajacaliforniano, había intervenido en la designación del ex síndico procurador en la secretaría general.
Y que la respuesta que obtuvo Enrique Pelayo fue una rotunda negativa. Que designar a Iván Alonso Barbosa Ochoa como secretario del XXII ayuntamiento fue decisión del ahora munícipe y de nadie más.
Que Novelo le aclaró que así como nombró a Barbosa, también lo puede quitar cuando lo considere necesario.
Enrique Pelayo Torres e Iván Barbosa Ochoa guardaban una añeja y estrecha amistad hasta que el segundo, ya despachando como síndico procurador en el XXI ayuntamiento de Ensenada, presentó una denuncia penal contra el ex munícipe y varios de sus principales colaboradores.
Enrique Pelayo Torres se refirió entonces de Barbosa Ochoa como un “traidor” y así lo exhibió en una reunión privada que ambos sostuvieron con Jorge Hank en Tijuana.
Este último, se supo después, conminó a Pelayo y Barbosa a llevar la “fiesta en paz”. Pero para el polémico ex alcalde de Ensenada el distanciamiento con su otrora amigo era algo consumado. Hasta la fecha lo es.
Por eso el cuestionamiento a Novelo.
Enrique Pelayo Torres sostiene en lo corto que la mayoría de los señalamientos hechos en su contra no tienen sustento y que él, en cambio, dispone de los elementos probatorios con los cuales evidenciar a sus detractores en actos irregulares.
Desde su salida como munícipe, en diciembre de 2013, Enrique Pelayo Torres se ha mantenido distante de los reflectores políticos y mediáticos. Sus asistencia a eventos propios de su partido ha sido reducida y su presencia en actos sociales casi nula.
Igual como cuando despachaba como alcalde, Pelayo sigue manejando su vehículo y sin ocupar de la asistencia de terceros.
Pelayo y Novelo, se asegura, son hasta la fecha buenos amigos.
Revelaciones últimas
Funcionarios de primer y segundo nivel que prestaron sus servicios en el XXI Ayuntamiento, incluyendo aquellos que despacharon como delegados municipales, tienen demandado al gobierno municipal por incumplir en el pago de sus finiquitos.
A los ex funcionarios simplemente se “les dio las gracias” sin entregarle los pagos económicos y que por ley les corresponde por el tiempo laboral prestado a la entidad municipal.
Las demandas siguen su curso, en tanto que el gobierno municipal se declara imposibilitado para pagar los finiquitos demandados.
Revelación final
“Limpiacarros” que operan en la periferia de parques públicos de la ciudad, pagan al gobierno municipal la cantidad de 815 pesos mensuales por concepto de permiso para ejercer la actividad.
Hasta la pasada administración municipal los aseadores de carros pintaban espacios públicos al interior de los parques a cambio de que los dejaran limpiar carros en las aceras.
Además del pago de 815 pesos mensuales, los “limpiacarros” tienen que sortear la intervención de preventivos municipales que no les hacen válidas las autorizaciones por el simple hecho de utilizar agua en sus quehaceres.