Ensenada ofrecía a los visitantes restaurantes, bares, comercios, venta de artículos para pesca y caza, servicios religiosos, bancos, seguros y más, pero indudablemente un servicio valioso para motivar la estancia prolongada a los turistas era el excelente servicio de hotelería del centro de la ciudad.

Ensenada tenía los mejores hoteles de la región como el Hotel Hidalgo (en paseo Hidalgo junto al edifico que hoy ocupa el INAH) el Hotel Linda Vista localizado en la avenida Obregón y calle cuarta, frente al edificio de la Benemérita Mutualista Progreso, Hotel Maya en la calle Obregón, Hotel Majestic en la avenida Ruiz y calle quinta, Hotel Ramírez en la calle primera No 121, frente a la esquina de la Ryerson donde hoy esta parte de la plaza Hussong, Hotel Virginia en el cruce de las calles Miramar y cuarta, los hoteles Comercial, Reforma México y otros que ya los comentamos anteriormente; también podemos considerar los Bungalos del Mar y otros fuera del Centro Histórico.

La cantidad de establecimientos de esta clase, da una idea cabal del movimiento y la importancia de una ciudad como Ensenada, pues el hecho de existir tantas casas de hospedaje, para nacionales y extranjeros, es prueba evidente de que así lo exigía la gran población flotante con la que contaba la ciudad, que estaba compuesta de viajeros de otras localidades de Baja California y turistas extranjeros y nacionales que por placer o negocio requerían estar en el centro económico y gastronómico de la ciudad.

Ayúdanos platícanos que negocios recuerdas y los lugares donde están o estuvieron dentro del Centro histórico, que se delimitó desde el paseo Hidalgo, toda la avenida Ryerson hasta la calle 7ª y de esta calle hasta la avenida Miramar, a la calle primera y subir hasta la Ryerson.

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