En una Casilla Contigua, me toco ser representante de partido. Con toda puntualidad llegaron el Presidente, Secretario y un escrutador, nunca llegaron el segundo escrutador y los tres suplentes.

Con una irresponsabilidad total apagaron todo medio de comunicación con el representante Presidente de la mesa de casilla, lo que propicio que la casilla se empezara a instalar a las 8:30 A.M.

Lo verdaderamente inconcebible es que en la línea había 15 votantes de sexo masculino reclamado, insultando acosando a los funcionarios presentes.

Cansado de su actitud les pedí respeto y que si realmente estaban preocupados por la votación y amenazaban con alborotar a la gente que fuera llegando, lo podían haber resuelto una hora antes, con cualquiera de ellos formados en línea, porque podían ocupar el puesto de escrutador.

Todos sin opción dijeron que no era su obligación, que era obligación del Gobierno. Entonces, una señora amablemente se ofreció a ocupar el puesto cubriendo al funcionario ausente.

Realmente esta clase de hombres son buenos para reclamar e insultar pero definitivamente son incapaces de aceptar una responsabilidad, pero eso sí, exigir creando un gran escándalo alborotando a todos los votantes en fila.

Son buenos para insultar y creer que la mesa de votación es una mesa de reclamaciones y devoluciones de un supermercado, pero incapaces de hacer un relamo formal y educado a la autoridad responsable. 15 hombres y nada de solución, una mujer con mucha disponibilidad y con responsabilidad con sus hijos aceptó el cargo. Para ellos era más importante el juego de Fútbol.

Pregunto: ¿Entonces porque se quejan de nuestros legisladores? Son más importantes 90 minutos de juego, que tres años de un legislador y con posibilidad de reelección hasta por 12 años.

Ojala hubiera más cultura cívica y la población conozca que es un procesos electoral, en lugar de tantos anuncios de los Partidos. ¡Urge educación cívica en las escuelas!

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José Luis Fernández Ruiz.

Director del Patronato Centro Histórico Turístico Cultural de Ensenada, A. C.