Para comprender el presente, hay que conocer y aceptar el pasado. Quien no mira atrás difícilmente aceptara el presente y no podrá construir el futuro.
El 8 de mayo de 1911, desde la mañana, Sam Wood y Ryece Pryce con más de 300 hombres sitian a Tijuana sin éxito. Esta ciudad tiene únicamente 29 hombres de línea al mando del subteniente Miguel Guerrero y se le unen los gendarmes y su comandante Miguel Mendoza con cinco hombres y dos celadores de la aduana; la guerrilla de Lerdo González, con siete hombres y los vecinos, sumando setenta y siete todos a las órdenes del subprefecto José Larroque quien esa noche ordena el ataque sobre los sitiadores.
Esta acción es llevada cabo por el subteniente Guerrero y treinta hombres, desplegando tal valor que los filibusteros retroceden. Murió ahí el General Sam Wood, retardándose e segundo ataque hasta el día siguiente que se hace desde la ciudad de Tijuana con setenta y siete hombres que inspirados en el valor del Subteniente Guerrero se convierten en verdaderos héroes.
Desde el amanecer aquellos héroes defienden con ira y valor aquel pedazo de tierra mexicana, hasta que sin parque y moribundos sucumben. Al medio día cae herido gravemente el subteniente Guerrero, José Larroque ya sin parque, herido. Muertos todos sus hombres se niega a rendirse y en un acto de patriotismo se arroja a caballo contra los filibusteros que lo acribillan.
Leer el manifiesto completo (anexo) es un documento histórico que nos ilustra y nos enorgullece al conocer nuestra identidad Baja Californiana. Esta signado por ilustres testigos presenciales: Esteban Sarabia, Arnulfo Avalos, Claudio R. Palacios, José Regalado, Ramón Crosthwite, Pablo Corral, Enrique Martínez, Jorge López y Luis G. Beltrán.