En el año 2013 se hizo popular sobre todo con los adolescentes el reto del condón o “condom challenge”, el cual consiste en introducir un condón por la nariz y sacarlo por la boca, filmándolo en video para demostraciones y pretenciones de viralización posteriores. Esto ocurrió junto a otra serie de retos que ponen en cuestión el discernimiento de las personas como el “ice bucket challenge” en el que incluso se videograbaron artistas famosos echándose cubetazos de agua con hielo solo “por diversión” o defendiendo causas que aparentemente no tenían nada que ver con hacer eso.
Marcela Aguirre, conocida como “La Mars”, es una vlogger conocida desde hace unos meses por hacerse viral con un video en el que declaraba que se saldría de la preparatoria porque el sistema educativo es retrógrada y criticaba a su vez que los jóvenes de su edad no pudieran tomar decisiones hasta la mayoría de edad. Ahora, “La Mars” vuelve a figurar en las redes sociales tomando el entonces ya no tan famoso reto del condón, volviendo a poner el tema en sistemas de noticias dudosos y confiables por las consecuencias a la salud que puede traer el que alguien imite las acciones de esta muchacha (a pesar de que ella misma instó a las personas a que no lo hicieran por el gran dolor que conlleva) sin saber que esto puede provocar incluso la muerte.
Introducir un condón en la nariz puede irritar la fosa nasal por el lubricante y otras sustancias con las que se hacen, dado que este es a base de agua pero tiene otros químicos que obviamente no están diseñados para entrar en la nariz y pueden provocar un sangrado y un rompimiento en la mucosa nasal si a eso le agregas la inadecuada fricción.
Además, podría ocurrir que el látex se pegue al orificio donde está la glotis, que es donde se abre y cierra la laringe con el esófago para poder permitir el paso del bolo alimenticio hacia el esófago y que éste pedazo o sea digerido o vaya a los bronquios y provoque una asfixia.
También puede suceder, como se ve en algunos videos, que quien está intentando sacar el condón por la boca lo estira mucho, provocando una especie de “ligazo” que puede generar un reflejo de taquicardia súbita e incluso un paro respiratorio.
Otras dificultades tienen que ver con las bacterias que puede haber en el condón por la manipulación con las manos sucias o de diferentes personas (y diferentes narices por usar varias personas el mismo condón para hacer el reto), nauseas y vómitos que vienen como reflejos al estar una fosa de la nariz ocupada.
Por lo tanto, si usted o alguien cercano está pensando en arriesgar su salud por unas cuantas vistas o por la fama efímera de la viralización, se le invita a que piense dos veces en si esto vale la pena. Una sencilla evaluación de los riesgos nos puede decir que llevar a cabo el reto no es precisamente la mejor idea para ganar algo de fama rápida.
Si ya lo hizo y las cosas salieron aparentemente bien, no deseche la posibilidad de ir con el médico de su confianza a que le revisen y laven el excedente de las sustancias del condón del interior de su nariz que pueden irritar su mucosa interna.
Como educadora de la sexualidad puedo decir que el que las personas jueguen con los condones en su proceso de conocimiento y desarrollo de competencias en la sexualidad es algo incluso deseable, pero siempre en condiciones que no pongan en riesgo su seguridad.
Generalmente el personal de salud y educación vemos con frustración que los jóvenes adolescentes jueguen con ellos, que los inflen, los avienten, los desenrollen, etc., porque a final de cuentas desde nuestra visión adulta son para el jugueteo sexual y nada más. Sin embargo, es importante que recordemos que la mejor manera de aprender es siempre jugando y practicando las acciones y valores que queremos inculcar para incluirlos en nuestras experiencias y aprendizajes vivenciales.
La idea es que ese juego trascienda en algo que proteja la salud de nuestras nuevas generaciones, no que la ponga en riesgo como esta clase de retos y en eso hemos de poner mucho más énfasis sin pretender quitarle la visión irreverente que de manera natural tienen los y las adolescentes de la sexualidad a la edad de “La Mars” y muchos de sus seguidores.