Anteponiendo los intereses extranjeros a los intereses de los mexicanos vemos los gobiernos federal, estatal y municipal como ante la falta de capacidad para ejercer sus obligaciones para defender nuestros derechos, prefieren ceder al ¨qué dirán los otros países¨. Esta semana con vergüenza hemos tenido dos acontecimientos: la llegada de los migrantes y la carrera fuera de carretera la baja 1000.
A la llegada de los migrantes, el gobierno mexicano fue incapaz diplomáticamente de defender la soberanía nacional, y prefirió dejar que se violenten todos los derechos de los policías, soldados, gendarmería, policías federales, y agentes de migración, a tener un apoyo a sus deberes defender los derechos de los mexicanos. Así vemos un gobierno incapaz de negociar con Honduras, El Salvador y Ecuador para que de una manera pacífica formalizar una migración ordenada con beneficios para los ciudadanos de los 4 países, incluyendo México. Confundiéndonos, haciéndonos creer que el exigir respeto y orden es xenofóbico. Exhibiéndose y no siendo capaz nuestro gobierno de defender y ayudar a los mexicanos pobres del sureste mexicano expulsores de migrantes a Baja California.
Al dejar llegar las caravanas de migrantes a Baja California se les quitaron los derechos a los migrantes de Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Puebla etc. que tradicionalmente son estados mexicanos migrantes, que Tijuana les da abrigo y comida en sus albergues; estos mexicanos con derechos fueron expulsados por los haitianos y ahora por los centro americanos, el comisionado de los derechos humanos de la ONU exige pero no ayuda y obliga al gobierno mexicano a ser candil de la calle y oscuridad de su casa, si existe un conflicto internacional con los Estados Unidos por un cruce masivo como sucedió en el sureste mexicano el ejército americano y sus policías defenderán su derecho hasta con la muerte de los migrantes y la culpa será del gobierno mexicano que no supo defender su soberanía y ahora llorara lo que no quiso defender.
Lo mismo sucede con la famosa carrera baja 1000 el gobierno federal, estatal, municipal amenaza pero tienen miedo de ejercer su autoridad por el que dirán internacionalmente. Ensenada tiene 51 años de carreras y sus gobiernos han sido incapaces de hacer un reglamento con un plan integral del manejo de estos evento, se quejan los ciudadanos, ejidatarios, comerciantes, transportistas; los conquistadores llegan como reyes porque en México vale más tener que pedir perdón que tener que pedir permiso que no se los den por depredadores, lo peor es cuando declaran los funcionarios: ¨es muy difícil, imposible ahorita la ruta la podamos cambiar¨.
Llevan 51 años dando la misma excusa, SEMARNAT , PROFEPA amenazan con multas, cárcel, etc. Nada de eso sucederá... serán el hazmerreír nacional e internacional, y esperaremos la próxima carrera para ver lo mismo que hemos visto 51 años, falta de autoridad.
Se pueden regular los eventos no suprimirlos, pero cuando dejaremos de ser el país, estado y municipio donde el pedir permiso será lo correcto y tener que pedir perdón será lo incorrecto. Los mexicanos somos los que nos humillamos y pedimos perdón a los que nos ofenden y no cumplen nuestras leyes: orgullo y disciplina es lo que nos falta.