La segunda temporada de "Street Food" es un homenaje para los héroes de las calles de Latinoamérica, después de los asiáticos, ahora le toca a Argentina, Brasil, México, Perú, Colombia y Bolivia.
La comida callejera se define como aquella que se obtiene de un vendedor en la calle; la mayoría es de oferta local, puede ser comida para llevar, comida chatarra, aperitivos y por lo general, resulta más económica que la disponible en restaurantes y supermercados. Por obvias razones, la falta de un adecuado manejo de la higiene de los alimentos suele desanimar a mucha gente a consumirla y la falta de refrigeración se suma a los limitantes, sin embargo, muchos de estos vendedores se las ingenian con ingredientes especialmente frescos para revertir estas debilidades.
Celebro que esta serie nos presente la conexión entre la comida y la historia de los protagonistas, historias llenas de pobreza pero también de la capacidad de supervivencia. Al mismo tiempo, estas conmovedoras historias nos demuestran que la pasión y la tenacidad son los ingredientes principales para que estos hombres y mujeres superen todo tipo de adversidades y lleguen a ser una referencia gastronómica de su localidad.
Basta de espectáculos de comida de viajes, Street Food logra visibilizar a los invisibles, es una serie que no oculta ni suaviza la pobreza que finalmente se convierte en una presión que define a las personas que quieren superarse y cocinar con placer. En definitivo Street Food es una serie altamente recomendable.