Esgrimió en su decisión asuntos personales. Eso dijo sin especificarlos.

Pero ciertamente esos motivos personales pueden tener soportes distintos. Veamos algunos de ellos:

1. El señor González decidió de plano aventar la toalla en su pleito con el gobernador Jaime Bonilla. Un pleito desgastante para ambos.

2. Su interés al frente de la alcaldía se agotó; lejos de la posibilidad de buscar la gubernatura por Morena y la misma reeeleccion, decidió retornar a sus compromisos personales.

3. Existen problemas de salud al interior de su familia que obligan de su total atención.

4. Al solicitar licencia, obliga la presencia de su suplente y termina por sacarla de la lucha por la candidatura morenista a la presidencia muncipal de Tijuana. Su suplente es hija del fiscal general en el estado y este último es compadre del gobernador.

5. González Cruz buscará la alcaldía de Tijuana desde un partido distinto a Morena, convirtiéndose con ello en factor para que el partido del presidente Lopez Obrador naufrague en la próxima elección.

6. Pactó con el gobernador del estado una salida “airosa” del cargo y sepultar con ello averiguaciones judiciales que existen en su contra.

7. González Cruz fue “invitado” a separarse del cargo a cambio de un cargo federal.

8. Pactó con Marina del Pilar dejar la presidencia municipal y evitar que su pleito, el pleito González-Bonilla, resten fuerza al proyecto poltico de la alcaldesa de Mexicali.

Cómo se puede observar, los motivos personales que obligaron al aún alcalde tijuanense anunciar su separación del cargo a partir de la segunda quincena de febrero, pueden tener un sustento muy distinto al que comúnmente se le da a los “motivos personales”.

Será Interesante poner atención en las declaraciones que el gobernador del estado, a Jaime Bonilla, emita al respecto.