Después de “Ensenada, Testimonio periodístico” (2010) y “Elogio de la resaca” (2015), Gerardo Sánchez García, nos deleita en esta tercera entrega, “Mexicanísimo” con un compendio de textos que han sido publicados en diferentes medios, y hace una aproximación a algunos temas ignorados por muchos, pero llenos de emociones y sentimientos. En esta antología, el ganador del premio estatal de periodismo nos muestra su amor a México y a Ensenada, a su gente, a sus lugares, a sus costumbres…
Al mismo tiempo, Gerardo nos comparte su pasión por la gastronomía. En esta ocasión comenzó con un homenaje a los tamales, y luego se cuestionó el nombre ¿guajolote o pavo?, además, investigó ese brebaje de cacao olvidado por los mexicanos que bebían los poetas y los sabios; hizo una reseña del libro de Sophie D. Coe sobre la importancia del maíz y su nixtamalización para los pueblos mesoamericanos, observó fiscalmente las delicias de la panadería mexicana y nos recordó la nostalgia atunera; especie que aportó dinero y orgullo a los ensenadenses; por obvias razones, no podía faltar el emblemático taco de pescado.
Durante la presentación del libro, se le cuestionó el motivo de la publicación en esta época de pandemia y desánimo, a lo que respondió sin chistar: porque me dio la chi#@da gana y al mismo tiempo, para demostrar que las cosas se pueden hacer a pesar de las circunstancias adversas que nos atraviesan.