Me hizo remontarme a mi niñez, juventud, adultez y ahora mi vejez. Recordar a mis padres José Luis Fernández Bandini y mi madre María Eugenia Ruiz Victoria, a mi esposa María Eugenia mis hijos Pepe y Juan Carlos, mi nuera Yajaira y mi nieta Montserrat así cada uno de ustedes recordara a sus familiares y sus recuerdos feliz navidad 2021.

La carta que me envió mi hermano Gerardo y su esposa Betty es la siguiente:

Nuestros padres nos inculcaron que la época de Navidad es un tiempo de celebración, una de las fiestas más grandes e importantes de nuestra religión, pero también nos enseñaron que es una época de reflexión, donde debemos tomarnos un tiempo para hacer un alto en el camino, analizar detenidamente que hicimos durante todo el año, así, como nos preguntaban cuando éramos pequeños, ¿cómo te portaste este año? Por supuesto siempre decíamos ¡muy bien! Pero ahora a través del tiempo y de los años, debemos detenernos un momento antes de contestar, ya que ahora tenemos más responsabilidades en nuestra vida, vivimos con los valores que nos inculcaron, tenemos compromisos con nuestra familia, esposa, hijos, nietos, hermanos, amigos, compañeros de trabajo, nuestra comunidad, con el mundo en general y si en algo fallamos, Dios siempre nos da la oportunidad de pedir perdón y de reflexionar para corregir nuestro camino y seguir adelante.

En esta época me vienen a la mente tantos recuerdos de la infancia junto a nuestros padres y hermanos, esas Navidades que pasamos en casa, alrededor de la mesa, con la clásica cena navideña, juntos, año tras año, ver cómo cada año crecía la mesa, más sillas, más platos, más comida, más galletas, poco a poco fuimos formado nuevas familias, llegaron nuestras esposas (o), hijos, nietos, pero todos siempre felices, junto al árbol decorado y la chimenea prendida, recuerdo que llegó un tiempo en que los regalos no cabían bajo el arbolito y todos esperando la clásica llegada de Santa con sus múltiples representaciones. También como olvidar nuestras famosas Pastorelas con tantas horas, días de práctica y convivencia, siempre rodeados de alegría, villancicos, bromas y mucha diversión, como cada uno tomaba su personaje y le daba vida, pero sin perder nunca la verdadera esencia de Navidad. Papá nunca dejó de representar la llegada del Niño Dios con su majestuoso Nacimiento, lleno de vida, recuerdo que nos decía, “El Nacimiento es la esencia de la Navidad”, gracias a estas palabras él está presente siempre cuando yo lo pongo en casa y también tengo a mamá presente en el momento del arrullo del Niñito Jesús que ella disfrutaba tanto, viendo a alguno de sus nietos o bisnietos cargándolo y como interpretábamos los villancicos algunos de nosotros un poco desafinados pero con mucha alegría. Navidad, donde siempre estarán presentes todos aquellos que en algún momento estuvieron con nosotros y ahora permanecen vivos en nuestros corazones, pero hay que aprender a vivir la Navidad con todos aquellos que aún siguen con nosotros, con aquellos que podemos abrazar, con aquellos con los que podemos hablar, a pesar de que estén lejos, en distancia y en estos tiempos estamos muy conscientes que quizás por la situación de pandemia en la que seguimos viviendo, probablemente no nos podamos reunir físicamente, pero la tecnología nos permite compartir recuerdos alegres, anécdotas, fotografías, también nos da la oportunidad de hablarnos y hasta vernos en vivo. Dios bendiga tu vida, a tu familia y que el Niño Dios mantenga tu corazón abierto para ayudar, para dar y recibir amor.

Hoy y siempre les deseamos salud y paz en sus corazones.

¡Feliz Navidad y mucho éxito para 2022!

Gerardo y Betty.

Ensenada, B. C., diciembre 2021