Moisés Naím es un escritor y columnista venezolano. Es miembro del Carnegie Endowment for International Peace, una institución en Washington con la cual ha estado vinculado profesionalmente desde 1993. Durante 14 años estuvo al frente de la revista Foreign Policy y desde 2011 dirige Efecto Naím, un programa semanal de televisión sobre asuntos internacionales que se transmite en decenas de países. En 2011 recibió el Premio Ortega y Gasset, el galardón más importante del periodismo español.
Sus programas son muy interesantes y variados, y en uno de ellos, Moisés Naím presentó algunos inesperados orígenes culinarios:
Hamburguesa: a pesar de que existen muchas versiones de su origen, la más creíble viene de Hamburgo, Alemania. Sucede que desde el siglo XIX, su carne de alta calidad se ha hecho famosa por un platillo de filete de res denominada “hamburge” que llegó en 1890 a los Estado Unidos, donde comenzaron a comer este filete entre dos rebanadas de pan, dando nacimiento a la comida que hoy conocemos.
Pozole: el plato que hoy conocemos es una sopa mexicana conocida como la cura de todas las penas. Aunque hay diferentes versiones, los ingredientes base suelen incluir maíz, chile y carne de cerdo. En varios textos históricos del México prehispánico, este platillo se preparaba como parte de un ritual indígena y la carne que se utilizaba era de ¡humanos!
Los nachos: el curiosos origen se dice que ocurrió en los años 40, cuando unas clientes americanas llegaron a un restaurante que estaba por cerrar en la ciudad fronteriza de Piedras Negras en México, el cocinero encargado, Ignacio “Nacho” Anaya decidió atenderlas y les preparó un platillo con las sobras del día, tortillas cortadas y fritas, queso y jalapeños. Lo llamó el especial de Nacho, dando lugar a esta popular comida.
Tempura: los vegetales cubiertos en masa y fritos no faltan en ningún restaurante de comida japonesa, pero esta técnica que hoy se conoce como tempura tiene sus orígenes en el plato portugués “pececitos del jardín” que consiste en freír judías cubiertas de masa. La receta llego a Japón en el siglo XVI de la mano de un grupo de marineros portugueses y cambió la cocina del país asiático para siempre.