Un empleado de un negocio que reportó a la policía que fue amarrado, amenazado con una navaja y despojado de 2000.00 pesos y otros objetos, confesó que el mismo había realizado el robo, por lo que fue detenido.
Seguridad Pública informó que a las 9:00 horas se reportó a C-4 que en la calle Obregón y Ámbar en un negocio de venta de agua de nombre Agua 2000, se encontraba un empleado amarrado en el interior.
Al llegar al lugar, el reportante, quien dijo llamarse Pablo Gilberto López Rodejo de 23 años, dijo que un día antes a las 19:00 horas llegaron al establecimiento una mujer que lo amenazó con una navaja y un sujeto que lo amarró a una silla, para despojarlo de una esclava de plata, un reloj de mano y 2000.00 pesos.
Minutos después cuando los policías entrevistaron a la presunta víctima, llegó una persona que dijo que vio a Pablo Gilberto cuando el mismo abrió el negocio esa misma mañana.
Ante esto, los policías volvieron a interrogar a Pablo Gilberto, quien confesó el haber realizado un autorobo, por lo que fue detenido por policías ministeriales, quienes se encargarían de su situación legal.