La Subprocuraduría de Zona Tijuana a través de la Unidad de Aprehensiones y Mandamientos Judiciales de la Policía Ministerial del Estado cumplimentó la orden de detención en contra de un adolescente por su presunta responsabilidad en el delito de violación equiparada en agravio de dos niños de 7 años de edad.
Se trata de Pedro “N”, de 16 años de edad, a quien el Juzgado de Primera Instancia Especializado para Adolescentes libró la orden de detención en su contra.
Los hechos que se le imputan se registraron el mes de enero del 2014, aprovechando el agresor que los menores eran sus vecinos y que salían a jugar en varias ocasiones, los jalaba a la fuerza a su casa en donde estaba solo y ahí los violaba.
Uno de los menores, refirió que uno de esos días en que el hoy detenido lo violó, quería gritar para que alguien lo escuchara, pero inmediatamente Pedro le tapó la boca al ofendido y éste le advirtió que si decía algo le encajaría una navaja y le pegaría.
La segunda víctima declaró ante la agencia del Ministerio Público de Delitos Sexuales y Violencia Familiar que el detenido lo llevaba a una casa abandonada para violarlo en repetidas ocasiones.
Fue un tío de uno de los menores que se percató que la víctima traía en su aparato de videojuegos DS videos pornográficos del Internet; sin embargo, los padres de las victimas también manifestaron haber detectado cambios conductuales en sus hijos a raíz de este suceso, por lo que hablaron con ellos quienes finalmente les confesaron lo que estaba pasando.
Tras la denuncia interpuesta por los afectados, el agente del Ministerio Público de Delitos Sexuales y Violencia Familiar integró la averiguación previa para su consignación ante la autoridad judicial especializada en adolescente, la cual otorgó la orden de detención de Pedro, por el delito en que se imputa.
Cabe destacar que dentro de las pruebas presentadas en la averiguación, se encuentra la confesión del detenido en donde reconoce plenamente haber violado a estos dos menores de edad.
Por su parte un dictamen pericial en materia psicológica practicado a las víctimas de estos hechos revela que ambos menores cuentan con afectaciones psicológicas en relación específica a los hechos referidos manifestando sentimientos de tristeza, vergüenza, preocupación, enojo y miedo al agresor entre otros sentimientos, cuyos padecimientos requieren de tratamiento psicológico.
Ante lo expuesto, Pedro “N” fue internado en el Centro de Tratamiento para Adolescentes a disposición del Juzgado de Primera Instancia para Adolescentes en donde se determinará su situación legal.