En apenas tres días, Ensenada recibió un nuevo baño de sangre desafiando en cada uno de ellos, a las autoridades que ocupadas entregando despensas, instalando filtros sanitarios o voceando el riesgo de la pandemia han permitido que la delincuencia aproveche para planear y ejecutar emboscadas mortales, en las que seis personas han sido asesinadas.
El recuento involucra de nuevo un policía y un joven abogado, además de dos mujeres y dos hombres más, junto con una serie de avisos desde diversos puntos de la ciudad que informaban al 911 de balaceras y heridos.
Con el inicio del mes este primero de mayo fue también el primer asesinato, un doble crimen en la Colonia Lomitas donde una mujer y un hombre fueron ultimados a balazos en una de las zonas de Ensenada donde el crimen se ha cebado.
Uno de los cuerpos quedó en la calle, otro dentro de un negocio. Si la fiscalía los identificó, el dato para variar no ha sido dado a conocer, bajo la premisa de no entorpecer la investigación, pero con la sospecha creciente de que muerto desconocido se vuelve difícil de reclamar y las familias son convencidas de ello confiando que el asunto se resolverá, pese a que en lo que va del año, las capturas de asesinos no llegan a una docena por parte de la ahora llamada Fiscalía General del Estado.
El mismo viernes primero, cuando aún no levantaban los dos cuerpos en Las Lomitas, un joven abogado, Joel Alejandro Arámbula Piña de apenas 36 años de edad, fue asesinado también a balazos en la calle Octava, entre Alvarado y Blancarte.
Su familia en el lugar, entre ellos varios menores, observaban y sufrían mientras la calle se mantenía acordonada tras el ataque ejecutado por desconocidos que usaron para escapar presuntamente una motocicleta de reparto de alimentos.
El sábado 2 de mayo, la ola violenta alcanzó de nuevo a una corporación, al Comandante de Francisco Zarco y Presidente de la Asociación de Policías que en ese momento llegaba a su casa. Víctor Manuel Ruiz Ponce, murió de forma instantánea.
Lo emboscaron, le dispararon y luego los cuatro sujetos que de acuerdo a los vecinos viajaban en la unidad de color verde, simplemente escaparon mientras se montaba un operativo sin éxito.
Por la noche, numerosas llamadas se registraron al 911, una de estas refería una balacera cerca del Soriana de la calle Delante, luego en la calle Abelardo Rodríguez y más tarde en Valle Dorado y luego en Punta Banda sin que se confirmaran lesionados. Hoy continuaron los reportes falsos, algo que de acuerdo a policías con experiencia en el tema es una forma de distracción para atacar y medir la respuesta de las corporaciones.
Este 3 de mayo el baño de sangre siguió, ahora en la zona de tolerancia actualmente vacía por la contingencia de Covid-19.
En este sitio un hombre y una mujer al parecer pareja fueron asesinados en un vehículo fuera del callejón del Chamula, célebre por el tráfico de drogas que desde hace décadas se realiza en este sitio asociado al sexoservicio.
En este asunto al parecer un pleito derivó en una balacera en la que el presunto asesino intentó escapar y deshacerse del arma, pero él fue detenido y el arma recuperada.
Se desconoce si está involucrado en otros asesinatos.
En la mayoría de estos casos los crímenes se han cometido en espacios abiertos, frente a testigos, incluso familias y en medio de la más absoluta impunidad.
Hasta el momento salvo la información de seguridad pública municipal, para variar, la fiscalía del Estado sigue sin dar señales de actividad en sus áreas de comunicación en los asuntos serios que afectan a Ensenada y mantienen aterrorizada a su población.
P.D. Guardar silencio y hacer como que no pasa, no significa que no pasó, significa que se omitió, intencional o no, sigue siendo omisión.