El proyecto fue desarrollado por la firma constructora Chec-Costain, consorcio integrado por las empresas multinacionales China Harbour y Costain Group de Inglaterra.

Paul Bowers, subdirector del Consorcio Chec-Costain, explicó que desde 2005 se trabajó en el acondicionamiento del área para la construcción de los Cassions.

El sitio, fue un terreno ganado al mar, junto a la desembocadura del Arroyo el Gallo, en donde antes de iniciar la construcción de los Cassions, se construyó un dique seco de 14 metros de profundidad y se acondicionó un área de 120 por 40 metros.

El dique funciona a través de compuertas donde los Caissons se flotan cuando están listos mediante un proceso de inundación y con ello, los mega cajones quedan en el agua donde flotan en forma natural.

En este dique, durante 2 años, mil trabajadores de diversas especialidades construyeron los 12 Cajones de cemento, arena y varilla que son huecos para finalmente llenarlos de agua y después de rocas y arena al ser situados en su ubicación final.

Una vez flotados los Cassions, fueron remolcados por embarcaciones especializadas que navegan a una velocidad promedio de un nudo por hora.

De los 12 Cassions, cuatro miden 36 metros de ancho por 68,3 de largo y 25,5 metros de alto, con un peso de 24 mil toneladas.

Los otros ocho miden 36 metros de ancho por 46 metros de largo y 25,5 metros de alto con un peso de 16 mil 500 toneladas.

 Para el apoyo a la mega estructura que representa el rompeolas, también en la planta de construcción de los cajones, fueron elaborados mil 100 Corloks de concreto y varilla, estos son colocados para protegerlo en su parte exterior.

El proyecto integral de ingeniería marina requirió la creación de 3 medidas de Corloks de 8, 11 y 15 metros cúbicos.  Los Corloks de 15 metros cúbicos. Para el movimiento de los materiales, se ha requerido de la operación de maquinaria especializada.

Este rompeolas de más de medio kilómetro de largo, es una obra de ingeniería marítima única en el mundo, equivalente a la longitud de siete campos de fútbol, con una profundidad de un edificio de siete pisos de altura.

La obra representó un trabajo continuo por más de mil días, arriba de 26 mil horas hombre laboradas, favoreciendo directamente a un estimado de 5 mil personas y sus familias, que día y noche, hicieron posible la estructura más grande del mundo en su tipo.

Con el flote del último Caisson y los trabajos realizados en la planta, Energía Costa Azul iniciará operaciones el primer trimestre de 2008 de acuerdo al programa establecido por la empresa desde el inicio del proyecto.