La industria de la construcción en Baja California cambió los métodos de edificación después del sismo que sacudió Mexicali y que se sintió en el resto de los municipios en abril de 2010.

El presidente de Compañías Mexicanas de la Industria de la Construcción de Ensenada (Comise) Gunther Padilla Martínez, calculó que el gasto de construcción se elevó un 15% debido a que, según la modificación al reglamento de edificaciones de ese mismo año, los desarrollos deben construirse con más acero y concreto.

“Las reglas cambiaron se viene previniendo todo tipo de construcción nivel estatal no nada más en Mexicali, en Ensenada, Tecate, Tijuana, Rosarito todos lo municipios construyen con diferentes normas ingeniería y, para poder que el ayuntamiento autorice una memoria de cálculo, se construye con más acero para evitar que las viviendas”.

El constructor sugirió a las familias bajacalifornianas contratar personal serio y profesional para ejecutar obras de desarrollo de vivienda con la finalidad de evitar una fatalidad en caso de un sismo.

“Lo que sugerimos es que la gente no se vaya a construir con el albañil que conoció en la esquina simplemente se acerque a una empresa seria que sigue los reglamentos que impone el municipio y el estado. Sobre todo que vienen especificado para soportar cualquier sismo y de lo contrario sería comercio informal que no garantiza”.

Por último reconoció que debido a la poca frecuencia con que se sienten los sismos en la ciudad, la comunidad se relaja y baja la guardia.