Don Cesar, un hombre admirable al que lo vencieron finalmente las muchas juventudes acumuladas que ocasionalmente lo hacen a uno que se enferme.

Lo entrevisté muchas veces a lo largo de mi trabajo como reportera, inicialmente era solo el papá de la amiga de mi hermana, luego se convirtió en mi fuente y en alguien con quien las entrevistas se alargaban con anécdotas e historias y luego para corroborar datos o fechas e incluso visitándole en su casa donde me compartió con Carmelita su esposa, mesa y biblioteca.

Era uno de los personajes más antiguos de la UABC (no de los más viejos aclaraba) pero tanto como la Universidad, que con risa contaba que era el auténtico 007, dato comprobable con un documento: Su credencial de profesor.

Hiperactivo, tenaz, brillante, curioso, aguerrido, pero sobre todo, fiel a sus tres amores, su esposa, la Universidad y la exploración que ha realizado como Ingeniero Geólogo que le dio entre otros trofeos, Punta China, un cementerio de dinosaurios y el sitio donde se ubica la termoeléctrica de Rosarito.

Obregón, tenía muchas historias para contar, cruces de nombres, de vida, de emociones, de encuentros y desencuentros, alrededor de Ensenada, de España y del Distrito Federal.

Su vida, por si misma podría ser el guión de una biografía, que pudo ser trágica, pero por la chispa que lo hace evidente donde se coloque, se convierte en un guión, interesante y divertido sin dejar de ser ejemplar.

Algo de niño.

Cesar Obregón nació en España en 1934 en Madrid, hijo de padres republicanos, un hombre de letras y una mujer de números, él abogado y periodista, ella Física matemática, quienes salieron de España cuando Francisco Franco dio el Golpe de Estado que volvió a la España republicana en un régimen dictatorial.

Llegó como otros miles de españoles a bordo del Ipanema, en 1939 con apenas cinco años de edad. A Veracruz primero y al Distrito Federal después en un éxodo donde la hospitalidad Mexicana fue clave para que los exiliados pudieran tener un nuevo hogar gracias a Lázaro Cárdenas y su esposa Doña Amelia.

La esperanza de los republicanos era que cayera Franco y que acabara la II Guerra Mundial, lo que ocurrió solo en una parte, porque acabó la Guerra pero Franco se eternizó.

Obregón pues, se educó en escuelas republicanas en México, y de ahí llegó a la UNAM lo que lo convirtió en Ingeniero Geólogo, una herencia que el identifica como materna por las matemáticas, lo que lo volvió un Puma de corazón.

Como estudiante coincidió en la UNAM con Cuauhtémoc Cárdenas, ambos estudiaban ingenierías y ambos fueron reprobados en Cálculo por el mismo maestro: Heberto Castillo.

A Heberto Castillo lo encontró años después en Ensenada como candidato a la Presidencia de la República, supo que era Puma e ingeniero y preguntó: ¿alguna vez le di clases? Obregón respondió ¡si! -¿y pasó? ¡no!, Castillo fue llano: Otro voto que se me va.

Ensenada y la UABC

Casi recién egresado la UNAM Obregón consiguió su primer trabajo profesional en una firma de exploración geológica que lo trajo a Ensenada.

Mientras esto ocurría la Historia de la UABC apenas empezaba en Ensenada promovida por Santos Silva Cota y por Pedro Mercado.

Obregón llegó a la Escuela Superior de Ciencias por casualidad, porque Pedro Mercado era un conocido de la ciudad de México y en Ensenada se encontraron caminando por la Avenida Ruiz, frente al Hussongs.

Obregón estaba en Ensenada contratado por la Compañía Chapultepec y por el Estado para explorar yacimientos de caliza y mineral de fierro.

Trabajaba ya como ingeniero en una empresa denominada Servicios Geológicos de la Ciudad de México S.A. y en la calle, Pedro Mercado le explicó que estaba formando una escuela superior de Ciencias Marinas y estaba sumamente entusiasmado con el proyecto, al que le invitó a formar parte.

Mercado trabajaba en un comité Prouniversidad que empujaba en ese momento Santos Silva Cota que era el Subdirector de ese grupo formado en Mexicali.

La Universidad nació autónoma pese a que el Gobierno quería que fuera del Estado. Ese origen autónomo, propuso hacer escuelas adecuadas a los recursos de la zona y no caer en las clásicas carreras de Leyes y Administración.

Pretendían apoyar el desarrollo de la zona con profesionales y esto evidentemente era el mar por lo que Santos Silva Cota, promovió la creación de la escuela Superior de Ciencias Marinas ahora Facultad de Ciencias marinas como el primer baluarte de lo que querían hacer.

Así, fue con el Doctor Pedro Mercado al frente, que era un biólogo del politécnico Nacional, que había hecho su especialidad en el SCRIPS como se inició la primera escuela Superior de Ciencias Marinas en el Conjunto Universitario UABC.

Obregón se integró pues de inmediato a la UABC donde dio diferentes cátedras, él fue el séptimo maestro de la universidad que tuvo como número original de maestros a cinco profesores y a él le tocó el número 007 el 1 de enero de 1962. Luego se convirtió en el 777, y muchos de sus alumnos tienen números de empleado previos, por cosas de la administración.

Esta Escuela Superior de Ciencias Marinas, muy pronto obtuvo reconocimiento internacional, porque fue la primera en su tipo en Latinoamérica y Ensenada fue su casa.

El 20 de mayo del 2010, fue nombrado Profesor Emérito de la UABC.

Las razones.

Obregón aceptó quedarse en la UABC, porque en donde trabajaba como contratista, cada vez era un mejor explorador, pero estaba dejando ciencia y estudio a un lado, por lo que la oportunidad fue bienvenida.

Además coincidía con otra fecha importante para él, estaba de novio en Ensenada y a punto de casarse con su gran amor María del Carmen Angulo, Mary para él, Carmelita para sus alumnos de Piano.

Ella era operadora del radio y Secretaria del Mayor Valdéz que era el Gerente de Chapultepec y de la ampliación Moderna.

Así Obregón, se quedó en Ensenada porque encontró tres amores; el de su profesión, que lo apasiona por la exploración y la búsqueda de nuevos horizontes. Su esposa y las ciencias del mar todo en Ensenada.

Obregón confiesa, que su amor hacia el mar no es nuevo, siendo adolescente intentó entrar a la Escuela Naval de Veracruz, hizo oposición y pasó pero era nacido en España por lo tanto no pudo ingresar.

Esto porque Cesar Obregón era finalmente un madrileño incomprendido un niño de la Guerra refugiado en México.

Si bien cuando Obregón bajó del Ipanema, como a todos los refugiados en México se les ofreció la oportunidad de naturalizarse y firmar en unas mesas que estaban al terminar la escalinata de la nave para aceptar ser mexicano.

Si la respuesta era afirmativa podían firmar y convertirse así en naturalizados para que pudieran trabajar, una acción de hospitalidad que permitió a los refugiados rápidamente sentirse como en casa.

Pero si bien los españoles podían trabajar en cualquier cosa y participar en cualquier actividad, no podían ser Militares, marinos o futbolistas y entonces su opción fue ser puma de corazón y maestro de ciencias marinas.

En México nació su hermana, ya como mexicana, pero ella no quería ser marina, ni militar, ni futbolista.

Su carrera

Obregón es egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México de lo que era el Real Colegio de Minería, después Escuela Nacional de Ingeniería y ahora facultad de Ingeniería, fundada en 1793; Puma pues.

Luego de egresar, el Ingeniero Obregón llegó a Baja California a explorar, descubrir e iniciar explotaciones de Punta China, el proveedor principal para la empresa CEMEX en ese momento Cementos California.

Obregón aclara que él no descubrió Punta China, simplemente a él lo mandaron a explorar zonas que estaban previamente conocidas, por parte de Lorenzo Flores Lizárraga uno de los maestros de minería de Obregón.

Llegó a explorar caliza y luego el mar para captación de agua para la termoeléctrica de Rosarito, proyecto que le dio en el 2008 el premio nacional como precursor de la exploración marina.

Esta exploración se hizo con equipo especial para perforar y efectuar el procedimiento de enfriamiento y vapor para mover turbinas

En la construcción de la termoeléctrica Obregón encontró el material rocoso necesario para construir el rompeolas que hay en Rosarito en un cuello volcánico en el arroyo del Morro.

Los volcanes, producen dos tipos de materiales, los que son extrusivos que forman los conos y el cuello que se enfría dentro de la tierra que es roca intrusiva,

Esta diferencia es importante porque la roca que sale extrusiva es muy ligera y la que esta dentro es muy pesada, y forman grandes piedras.

De esta manera por muchas piedras que se consigan extrusivas como son porosas, como la piedra pómez, no pesan nada, pero las intrusivas no, son muy pesadas excelentes para una construcción de gran magnitud.

A Obregón lo mandó el General Clark Flores a buscar la roca para el rompeolas, con la esperanza de que no la hallara, porque el objetivo era construir tetrápodos de cemento y venderlos.

Pero al encontrar la roca. decidió tener al enemigo en casa y contrató a Obregón finalmente en 1962 para trabajar en la cementera que estaba operando desde 1956 para que no siguiera encontrando las rocas indebidas y afectando el negocio, -platicaba riendo-.

En ese momento la fábrica de cementos tenía un problema de materia prima , por lo que buscó como alternativa nuevas fuentes de materia prima, una de estas era Punta China de donde se empezó a sacar entonces la piedra caliza y transportarla por la vía marítima.

En este proceso esta transportación se convirtió en un éxito porque el cabotaje logró reducir costos, al mover la caliza primero con un chalán que era jalado y luego ya transformado en cemento, se empezó a vender en Chiapas cemento de Baja California a un precio muy competitivo.

La Cementera entonces, producía 2 mil toneladas diarias y esto los obligó a busca nuevos mercados en la República Mexicana, por lo que Cemex construyó muelles para descargar en La Paz, Vallarta, Topolobampo, y Puerto Madero.

Antes de concluir su trabajo en Cementos California, luego Guadalajara, Obregón enfrentó una de las grandes guerras económicas la colocación de aranceles por parte de Estados Unidos al Cemento Mexicano aduciendo dúmping, derivado del potencial de producción.

Obregón fue a mediados de los 80 Director del CUME, Consejo de Urbanización Municipal de Ensenada, y fue él, quien inicio los procesos para que este Consejo realmente operara para la pavimentación con concreto de las colonias populares de Ensenada, que mantenía un rezago de décadas. Una obra que poco a poco nuevas administraciones fueron desmantelando para regresarla al estado lastimoso en que hoy se encuentra.

Cesar Obregón fue Maestro de todas las generaciones que pasaron por la UABC desde su fundación a la fecha, miembro activo de distintos organismos públicos y privados, dando clases, aprendiendo, explorando, viajando y en sus ratos libres malcriando nietos.

A poco de empezar la Pandemia, la salud del Ingeniero Obregón empezó a mermar. Cosas de la juventud acumulada en 88 años de vida.

Ingeniero, donde estés, ahora Descansa en Paz.

El nombramiento como Profesor Emérito de la UABC.: