Los contenidos en los libros de texto para primaria en la llamada Nueva Escuela Mexicana, son un motivo de preocupación para COPARMEX, ya que al carecer de matemáticas, español y ciencias provocará una generación cargada de ideología pero sin fundamentos básicos para competir en un mundo globalizado.
Aunque hubo una demanda ante un juzgado para que se detuviera el reparto de los nuevos libros de texto en México en tanto no fueran analizados cuidadosamente por expertos, y un juez otorgó una suspensión, el gobierno federal desacató esta decisión y procedió a la entrega de estos libros.
En conferencia de prensa, el dirigente estatal de la Federación Coparmex Gustavo Fernández de León indicó que “con estos nuevos libros de texto que acaban de salir a la luz, creo que nos pone alarmas, nos prende focos rojos, nos prende una preocupación. Estos libros de textos, inclusive actualmente, no han sido analizados por los sectores especializados porque se han desarrollado en la opacidad”.
En administraciones anteriores apuntó hubo desacuerdos con algunas reformas, sin embargo hubo transparencia y posibilidad para dialogar con quienes desarrollaban los libros de texto, pero en esta ocasión no solamente no se hizo sino que no consultó a la sociedad civil, maestros, padres de familia, o al sector empresarial.
Asimismo las consultas que se hicieron en algún momento dado con “maestros” fueron reservadas como confidenciales sin acceso a ellas, pese a que la educación es un derecho público.
¿Que se sabe al momento? -cuestionó- “Desaparecen los libros de matemáticas y español, de ciencias, y se hace un libro múltiple”.
Hasta el momento se tiene muy poca información, pero es necesario revisar para ver cómo vienen con temas de ideología se sabe que “vienen muy cargados de ideología y con muy poca ciencia y muy poca tecnología”
Agregó que desde Coparmex se mantiene un foco rojo porque toda la sociedad debe participar activamente, al margen de que el sistema educativo abra estos procesos para que los padres de familia tengan más información respecto a la educación que recibirán sus hijos y puedan de ser necesario complementar o completar la formación que van a recibir en la escuela pública.
Respecto a la posibilidad de llevar este caso a la Suprema Corte de Justuicia de la Nación, precisó que padres de familia organizados a nivel nacional, solicitaron ante un juez, que se detuviera la distribución de estos libros y el juez emitió esta suspensión al gobierno federal.
Aparentemente lo acataron pero solo durante un tiempo porque finalmente, sin haberse resuelto esta indicación, el gobierno federal continuócon la distribución de los libros y desacató la medida del Juez.
“Es bien importante entender cómo llegaríamos a la Suprema Corte. Estamos esperando los libros de texto para ver la afectación y tienen que ser obviamente los interesados directamente, padres de familia y niños que también deben estar unidos y por supuesto estaremos trabajando, no podemos decir hoy que haya un plan para subir a la Suprema Corte de Justicia de Coparmex, no lo podemos decir como tal, pero sí ver que los interesados directamente, padres de familia, alumnos tengan este acceso y tengan esta información y puedan hacer lo propio en ese sentido”.
El efecto de estos libros de texto, sin matemáticas y sin ciencia, será visible en una década y el impacto será en las competencias de las que carecerá un joven cuando ingrese a carreras que exigen el conocimiento o cuando el país tenga que competir en un mercado global.