De acuerdo a la información oficial a las 20:20 horas del 31 de octubre, oficiales realizaban un recorrido de vigilancia, cuando les reportaron de barandilla que en el ejido del Ajusco, se encontraba un vehículo tipo pick up, de color negro, circulando a exceso de velocidad y derrapando.

Los agentes se dirigieron al sitio a buscar el vehículo reportado, y encontraron huellas de derrape sobre el carril vehicular de terracería, las cuales llegaban hasta donde estaba estacionado, sobre la calle Lázaro Cárdenas y calle 5 de Mayo, una unidad móvil que coincidía con las características proporcionadas por el radio operador.

Dentro del carro se encontraba una persona de sexo masculino, sentada sobre el asiento del piloto, por lo que los uniformados descendieron de la unidad policial para intervenirlo, identificándose como policías municipales, y le explicaron el motivo de su presencia en el lugar.

Al momento de entrevistarse con el individuo, manifestó incoherencias y contradicciones sobre su estancia en el lugar, además de adoptar una conducta nerviosa, por lo que le solicitaron su licencia de conducir, tarjeta de circulación, y/o registro vehicular, a lo que respondió que no contaba con ellos.

Los efectivos municipales vieron que debajo del asiento del piloto, se apreciaba lo que al parecer era un arma corta, posiblemente de fuego, razón por la que se acercaron para verificar, percatándose que era un arma corta de fuego hechiza.

Además, al practicarle una inspección corporal, descubriéndole en la bolsa del pantalón 16 cartuchos de calibre desconocido. Como consecuencia, a Mario “N” de 21 años de edad, fue detenido y trasladado a la Estación Central de Policía, donde se le elaboró el certificado médico, para ponerlo a disposición de la Fiscalía General de la República.