El 31 de marzo, el hallazgo de una familia asesinada en Camalú conmovió no solo a la opinión pública del sur del municipio, sino a su cabecera luego de confirmase la muerte de tres personas de la familia Altamirano Cruz.

La mañana del 31 de marzo se localizaron dentro de una letrina de una cada de la calle Biznaga en el poblado de Camalú, delegación de San Quintín, tres cadáveres, uno de estos de una niña de apenas cuatro años de edad.

Los muertos Juan Altamirano, de 32 años de edad;  su esposa Roberta Cruz Mendoza, de 34 años y su hija de 4 años de edad Yazmín (N), todos originarios de Oaxaca.

Los dos primeros cuerpos en mención, tenían huellas de violencia golpes contusos, excoriaciones y heridas, al parecer, por arma punzo cortante, mientras que a la menor de edad no se le apreciaron huellas de violencia a simple vista.

Un mes mas tarde la policía Ministerial logró la captura del multihomicida de la familia Cruz Altamirano, un sujeto de apenas 19 años de edad.

El nombre de éste Ceferino Sánchez Ceferino, alias “El Pacuso”, de 19 años de edad, originario de Sinaloa, quien confesó haber privado de la vida a: Juan Maya Altamirano, de 33 años de edad; Roberta Cruz Mendoza, de 33 años de edad y a Yazmín Maya Cruz de 5 años.

El asesino confesó que el asesinato lo había cometido el 28 de marzo, tras haber sostenido una discusión -mientras ingería bebidas embriagantes- con Juan Maya Altamirano, en la que éste quiso agredirlo con un barrote, por lo que se le adelantó y prefirió ser él quién lo lesionara, causándole la muerte instantáneamente.

Posterior a la agresión, tomó un cuchillo de mesa y agredió a la esposa del occiso, Roberta Cruz, para después ingresar al cuarto donde dormía la menor Yazmín, y asfixiarla.

Luego tras privar de la vida a los tres integrantes de la familia, los arrastro y los lanzó a una fosa cerca de su casa, ubicada en la calle Biznaga, del Ejido Capricornio, donde fueron localizados días mas tarde el viernes 31 de marzo.