Si aunque suene raro, para morir, el mayor riesgo es entre conocidos, no entre desconocidos, donde si bien se da en algunos casos, la realidad es que en la mayoría la víctima y su victimario tenían alguna relación cercana.

Amigos, conocidos, compañeros de trabajo, mezclado con coraje, rencor, y deseos de venganza no son una buena combinación y pueden dar como resultados datos escalofriantes.

Sin embargo no los datos arrojan también que es más fácil morir solo que acompañado, ya que del total de casos que se presentaron a lo largo del 2007 en cuatro asuntos fueron homicidios dobles y los restantes fueron sencillos.