El tema surge por la estadística más reciente presentada por la firma Pricewaterhouse Coopers, en el que se muestra como la inversión publicitaria en Internet desplazó en ingresos a la televisión abierta en el 2013.

Las grandes marcas no hacen más que seguir las dinámicas sociales relativas al consumo de medios, en base a esto, plantean sus inversiones donde encuentran la mayor efectividad.

Se ha denominado como “segunda pantalla” a lo que utiliza el usuario para mantener su contacto con Internet mientras ve televisión. En nuestro sondeo, el grupo más numeroso resulto ser el de personas conectadas por medio de una tableta o un teléfono inteligente mientras ven televisión. 41 por ciento de los casos.

El 23 por ciento nos confirmaron que mientras ven televisión hacen uso de un equipo de cómputo regular, computadora de escritorio o laptop.

El grupo que mantiene un constante crecimiento es el de quienes declaran no ver televisión, por lo que no es extraño que las grandes cadenas estén planteando proyectos basados en video bajo demanda.

Finalmente, solo el 18 por ciento nos dijo que se desconecta de Internet para ver televisión. Un grupo sumamente reducido al que aspiran llegar aquellos que basan sus campañas publicitarias en televisión.

Sin embargo, la que durante el siglo veinte se considerara la reina de los medios de comunicación no es la única que lo pasa mal: la radio y en especial los periódicos impresos se mantienen a la baja.