El tema surge a partir de una petición de una regidora del Partido Verde ante el cabildo Ensenadense, con el argumento de que dicha modificación a los reglamentos municipales podría frenar el maltrato animal. Los ediles priístas manifestaron su rechazo y salieron en defensa del derecho al entretenimiento para familias de escasos recursos, incluso, se preocuparon por la pérdida de empleos en las carpas circenses.

Así de divergentes son las formas de pensar de ambas partidos políticos que hasta donde podemos ver, solo se ponen de acuerdo cuando en las matemáticas electorales no les salen las cuentas.

El Verde toca un tema sensible, pues todo lo que sea a favor de la conservación goza de cierto prestigio entre la población, pero como se ha dicho hasta el cansancio, no basta para sangrar del erario público los millones y millones de pesos que se llevan vía financiamiento.

¿Qué se puede esperar de ellos cuando su líder nacional, el chamaqueado Jorge Emilio González, descalificó un estudio del COLEF que se oponía al incremento del IVA en la frontera con “unas compras que mandó hacer al Oxxo”?

El resultado de nuestro sondeo debe ser un llamado de atención para todas las autoridades, pues es un hecho que el tema es importante para muchos ciudadanos. Esto no es para oposición radical o para aprobación instantánea… debe ser parte de un análisis serio por parte de nuestros institutos de investigación.

Lo lamentable es que se use como chantaje por parte de un partido político que ha vivido gracias a que se alía con el mejor postor, para conservar el registro y mantener cierta cuota de poder, que es donde está el negocio.