La semana pasada le preguntamos ¿Cree usted tener una razón para denunciar a la CESPE ante la Procuraduría Federal del Consumidor? 9 de cada 10 nos dicen que si. Gracias a todos por expresar su opinión.
El tema surge por una declaración de Julio Felipe García en la que mencionó que en los últimos cuatro meses no existe denuncia alguna contra la Cespe, ¨aunque manda más aire que agua¨.
En muchas ocasiones pensamos que interponer una denuncia sirve de poco, sin embargo en este caso particular, los ciudadanos debemos utilizar lo que quizá sea el único recurso que existe para defender nuestros derechos.
Aunque los funcionarios de la Cespe llevan el foco del problema a la falta de agua en la región, lo que realmente molesta a la sociedad es el trato despótico de los funcionarios, la forma cínica en que tratan a los usuarios y la oscuridad en el manejo de la información sobre el servicio.
¿El colmo? Cualquier persona que tenga un negocio (tiendita, oficina, consultorio, etc) sabe que debe pagar mensualmente una cuota cercana a los 400 pesos, ¨y los debe pagar aunque en todo el mes no le llegue una sola gota de agua¨ dice Cespe cuando se trata de interponer un reclamo.
El problema es que no pagar implica comprar un problema a futuro, pues la deuda se acumula y tarde o temprano se convierte en una bomba financiera donde el gobierno siempre tiene el sartén por el mango.
Este no debería ser solamente un caso para Profeco. Aquí sería necesaria la intervención de autoridades de los tres órdenes de gobierno, pues lo que está sucediendo afecta la vida de demasiadas personas, especialmente en materia de salubridad y las omisiones, quizás delitos, quedan en una total impunidad.