Al 15 % de los participantes le gustaría una participación como candidato a diputado independiente en la próxima elección federal, pero para esto los tiempos ya están prácticamente encima.

Al 5 % le gustaría que fuera candidato a regidor en la elección de 2019, en la que se renovará el congreso local y tendremos cambio de Gobernador y de Alcalde. Una primera posición en la planilla fácilmente le aseguraría una posición en el próximo cabildo, pues como es de conocimiento público, se trata de un lugar reservado para la mano que mece la cuna en cada organización política, con buen sueldo y mejores prestaciones.

Prácticamente 3 de cada 10 lo ven como candidato a Presidente Muncipal en lo que podría configurarse como una especie de voto duro independiente: electores desencantados de los partidos, de todos, dispuestos a dar su apoyo a un buen esfuerzo ciudadano.

¿Arregui o Julio Felipe por el PRI? dependerá de la próxima elección federal; ¿Eloisa Talavera por el PAN? Sólo si Kiko Vega mantiene las manos lejos del proceso; ¿Ayala por Morena? ¿Reyes o Agaton por el PT? ¿Otros mareados por la extensa colección de partiditos que en nada ayudan y mucho estorban? Da igual, sus posibilidades son mínimas.

Todo apunta para que nuestro próximo alcalde sea producto ya no de un volado, sino de un disparejo. ¡Van a estar buenos los memes!