Del 1 al 7 de noviembre le planteamos en Ensenada Net… ¿Considera usted que el juego en los casinos pueda convertirse en un problema de salud pública? El 73 % de quienes participaron en nuestro sondeo nos dicen que si.
Nuestro sondeo lo confirma: El problema está a las luces de todos.
El gobierno federal tiene una poderosa razón para intervenir en esto lo menos posible: nada menos que un impuesto especial del 30 por ciento para las empresas operadoras de maquinas de juego.
Es decir… de los 8 mil millones de pesos que genera esta industria anualmente, 2 mil 400 millones van directamente al gobierno federal. Esta cantidad es similar al Presupuesto anual de todo el estado de Baja California para el 2011, por ejemplo.
En la versión 2010 del Tenorio de los periodistas, entre broma y broma se planteo: Si están llenos los casinos… ¿Cuál crisis?
Sin embargo el punto de vista económico es sólo una parte.
Salvador Rico Hernández, Director de los Servicios de Salud del Instituto de Psiquiatría del Estado de Baja California, comenta que los ludópatas (aquellos que sienten un impulso irresistible por jugar), tienden a sufrir problemas económicos, sociales y legales, que pueden abarcar desde la bancarrota, el divorcio, la pérdida del trabajo e incluso un tiempo en prisión.
Algunos psiquiatras, dijo, consideran este trastorno como algo muy similar a la adicción al alcohol o a ciertas drogas.
En Seguridad Pública Municipal se han registrado casos de niños olvidados en sus escuelas; algunos de estos descuidos los atribuyen al tiempo que pasan sus madres en los casinos locales.
El problema existe y se piensa que no dejará de crecer. De acuerdo a la Asociación de Permisionarios de Juegos y Sorteos, se estima que dentro de diez años esta industria genere 40 mil millones de pesos… cinco veces lo que produce actualmente.