El tema surge por una declaración del Secretario General de Gobierno… una en la que se lava las manos y de paso, le lava las manos también a los miembros de la PGR y todo lo que venga de Presidencia de la República, para finalizar con una limpiadita a las extremidades de los jueces, antes de pasarle la papa caliente a los legisladores.

Así lo dijo:

“Existen espacios principalmente de carácter legislativo porque evidentemente tenemos este tipo de eventos donde la gente finalmente tiene un resquicio jurídico que les permite salir en el procedimiento judicial.”

El argumento de las leyes mal hechas solo convence al 12 por ciento de nuestros usuarios. El 25 por ciento opina que se trata de leyes mal aplicadas.

Al parecer, la única ley que funciona a la perfección es la Ley de Murphy que dice: “El trabajo en equipo es esencial, te permitirá echarle la culpa a otro”.

Cardona señala a los legisladores, que están demasiado ocupados en la sucesión presidencial y en el caso específico de Baja California, preparando de una vez las próximas elecciones locales.

En el problema de la aplicación de la ley, el tema de la coordinación institucional les da un espacio para cumplir… pero con la de Murphy, porque ahora resulta que el fracaso evidente y notorio de lo que hacen y que nos tenemos que desayunar a diario, resulta que es culpa de nadie.