El asunto no resultaría tan vergonzoso de no ser que se trata de política y ha sido definida “como el arte de alimentarse con excrementos sin hacer gestos” para que no suene tan feo.

La justificación como en todo lo que tiene que ver con el rollo feminista es que a la mujer no se le ha dado su lugar en la política y ahora se la tienen que dar por aquello del “empoderamiento”.

Yo pensaba que las posiciones y el respeto se ganan derecho, sin trampas con equidad, que significa igualdad. Pero es política y en esta todo se vale.

La mujer en este caso pide equidad, pero que se le trate diferente o sea que se le de el mismo derecho que al hombre en la política pero no porque trabajó por él, porque la eligieron y se lo merece, sino solamente porque es mujer y eso no se vale.

Es posible que muchas mujeres no estén de acuerdo, que digan que los hombres son aprovechados y tramposos y que en la política los machos son los que mandan y se salen con la suya siempre poniendo a sus amigotes y por eso esta cuota se vale.

¿Pero porque no ganaron las mujeres precandidatas del PAN que contendieron? ¿Qué no había suficientes mujeres para sumarse y ganarle a los hombres?

En el padrón electoral el 51 o 52% son mujeres. ¿Si gana uno de los candidatos hombres, a Josefina por ser mujer le tendrán que dar al menos la Secretaría de Gobernación?

El tema es polémico, pero lo cierto es que si eres mujer y te ganas el respeto de los varones y las mujeres, por lo que haces, quieres, decides, no es necesaria una cuota de liderazgo o de poder, llega sola.

Lo mismo sucede a la inversa, si eres mujer y no te ganas el respeto por lo que haces, quieres o decides, así te entreguen una cuota de poder en un partido, nadie te dará el respeto, porque ese no va junto con la cuota. Ese se gana.

En este mitote de las cuotas, los mas experimentados por viejos y por diablos, lo han resuelto de una manera por demás elegante. Renunciaron y parecen caballeros sin aspavientos.

Los más nuevos y soberbios, no solo lo han hecho de una manera penosa, sino que ahora han filtrado incluso, premios de consolación (CESPE o Secretaría General de Gobierno) para el expulsado y las decisiones han sido 100% desde la cúpula, algo que han criticado siempre, pero no pueden dejar de copiar.

En esta historia pues, en Ensenada, el PRI, va en caballo de Hacienda, el PRD tiene posibilidades interesantes, el PANAL ya se ve en un ultrasonido y el PAN terminó en aborto.

P.D. Lo más seguro es que recurran a una adopción.