EXTRATERRESTRES EN ENSENADA

Tan inexplicable como los misteriores y extraños dibujos en los campos de trigo de Inglaterra; tan sorpresiva como la gira del chupacabras por tierras mexicanas y tan inquietante como el enigma del tríángulo de las Bermudas, así resultó el fracasado intento por regularizar los autos chocolate que circulan por Ensenada.

El presente artículo trata de esclarecer este profundo, incomprensible y recóndito misterio, mientras da lectura a este texto, recuerde y escuche suavemente el tema de Los Expedientes X: fu, fi, fi, fu, fuuu, fu, tarariraruruuu.

El cuatro de marzo del presente año la Secretaría de Hacienda y Crédito Público decretó, autorizó, permitió, realizar la importación de vehículos

usados por la Aduana Marítima de Ensenada.

El propósito, era regularizar la importación de cinco a seis mil automóviles de los llamados CHOCOLATES en el periodo comprendido del cinco al 31 de marzo.

La tradicionalmente insensible Secretaría de Hacienda respondía así a las demandas, reclamos, peticiones y ruegos de quienes realizaron mítines, manifestaciones, marchas y protestas para tener y obtener facilidades en la importación de sus vehículos chocolateados.

El entonces Administrador de la Aduana Marítima, Alberto Roldán, indicó que se esperaban de cinco a seis mil propietarios que en tropel acudirían a

importar sus vehículos ante la asombrosa facilidad de no tener que llevar su automóvil hasta el otro lado. Esto reduciría costos y facilitaría las importaciones, al menos esa era la teoría.

Sin embargo, el 31 de marzo, al vencer el plazo, solamente 28 automóviles, si leyó bien, 28, veintiocho autos, fueron importados aprovechando el supuesto beneficio fiscal.

¿Qué ocurrió?, ¿porqué no se importaron los miles de autochocolates?.

Algunas personas que intentaron hacer la importación señalaron que las Agencias Aduanales pretendían aplicarles el llamado Libro Amarillo.

Ello a pesar de que supuestamente en el decreto se establecía que los trámites y costos de importación por la Aduana Marítima serían

EXACTAMENTE LOS MISMOS que en cualquiera de las otras aduanas fronterizas.

Quién dijo que debía ser el Libro Amarillo y no el Libro Azul?... Misterio.

En las agencias aduanales, no sabían explicarlo ni mostraban algún documento del porqué se usaba el Amarillo y no el Azul.

Durante todo el plazo fijado por el decreto las largas filas de importadores de autos no se veían por ningún lado.

Porqué los otrora activos y entusiastas manifestantes no hicieron alguna marcha para pedir se agilizara la importación y/o rechazar el Libro Amarillo?... Misterio.

Porqué las autoridades fiscales tanto ESTATALES como FEDERALES, no realizaron una rápida y pronta investigación y actuación para ayudar a resolver el punto donde se atoró esa importación masiva de autos irregulares?... Más misterio.

Porqué las agencias aduanales no levantaron su voz para poder captar a los miles de clientes que supuestamente les traería esa importación

tumultuaria de vehículos?... Archirecontramás misterio.

Pasaron los días y el plazo del decreto se agotaba mientras los autos chocolate y sus respectivos propietarios no aprovechaban la generosa oferta/prerrogativa de Hacienda y Crédito Público.

A nadie pareció importarle que el decreto facilitador de importaciones no sirviera para nada. Ello a pesar de que las autoridades federales y estatales han reconocido que la circulación de autos chocolate es un grave problema social, político y de captación de ingresos fiscales.

Un decreto no aprovechado a pesar de los temores, angustias y sufrimientos de los propietarios de autos chocolate de ser víctimas del decomiso de sus vehículos y sus supuestos anhelos y reclamos para que el Gobierno les ayudara a regularizar sus automóviles.

Hoy sin embargo, de manera gratuita y en exclusiva podrá usted conocer las posibles explicaciones de estos singulares enigmas:

HIPÓTESIS NUMERO UNO y la más útil para cualquier ocasión:

1.- La culpa es de esos periodistas chilangotalibanes que pretenden

desestabilizar el régimen de Catalán.

HIPÓTESIS NUMERO DOS. la segunda más útil para cualquier ocasión:

2.- La culpa es de Catalán y su asesor Anselmo Saad.

HIPÓTESIS NUMERO TRES, no tan versátil, pero muy de moda:

3.- La gente no acudió a regularizar sus autos debido a la guerra de Estados Unidos contra Irak.

HIPOTESIS NUMERO CUATRO, científicamente la más cercana a la realidad:

4.- Seres extraterrestres infiltrados en la sociedad ensenadense son los propietarios de los autos irregulares y tuvieron temor de que al iniciar sus trámites de importación se descubriría que NO ERAN AUTOS CHOCOLATE, sino naves interplanetarias.

Aunque claro el miedo no era a ser descubiertos, sino por los elevados pagos de tenencia que aplicaría la Secretaría de Hacienda a sus respectivas naves.

HIPOTESIS NUMERO CINCO, un poco dura e incomoda social y políticamente:

5.- Ni a las autoridades fiscales, ni a los propietarios de autos chocolate les importa real y verdaderamente regularizar esa situación.

Esta última teoría por supuesto no resulta muy agradable, por lo que le invito a compartir la cuarta Hipótesis, ya que si culpamos a los

extraterrestes puede ser que hasta Jaime Mausan nos visite y grabe un video que muestre cómo los naves chocolatextraterrestes se pasean frente a los sufridos ciudadanos que si cumplen sus pagos y que miran con envidia y rencor tanto a los policías fiscales, como a los dueños de autos

chocolateados.

Un caso más para los Expedientes X.

TAN TAN