El encabezado del jueves del Periódico el Vigía que anunciaba a ocho columnas que Rubén Ayub estaba acusado de corrupción, sonaba como una redundancia o un pleonasmo, especialmente con la fama pública que carga este funcionario desde que lo es y antes de serlo.
Leída y releída la información, como dijeron varios periodistas, decir que el funcionario en cuestión esta acusado de corrupción no es noticia, por lo menos no es una noticia nueva.
Ruben Ayub lleva una larga trayectoria en donde su paso por dependencias, asociaciones y clubes ha concluido con una estela de situaciones donde su reputación ha quedado en tela de duda especialmente en materia de honorabilidad.
Sus antecedentes incluyen desde una inhabilitación como funcionario público a una expulsión del Club Rotario y problemas con el Colegio de Ingenieros.
Se suma a ello un proceso de inhabilitación que estaba a cargo de Contraloría del Estado cuando estaba al frente Carlos López Tapia a la que no se dio trámite a tiempo y prescribió, coincidentemente cuando estaba al frente de la campaña del actual Alcalde de Ensenada.
Se suma a esta trayectoria la petición del Consejo Coordinador Empresarial al alcalde al iniciar su gestión para que no incluyera, precisamente por su fama pública, a Rubén Ayub en el gabinete.
Otros datos curiosos que se podrían agregar si se tratara de un currículo, es el famoso asunto de la Isla con que se pagó la fianza de Cabal Peniche valoración de la tierra inflada para cubrir una fianza, donde el nombre de Ruben Ayub sale a relucir de nuevo.
Otro tema es el de SEMPRA un viaje a oriente con todos los gastos pagados, en misión empresarial y luego permisos en una zona donde la vocación es turística y pesquera.
Otro es el asunto de la empresa Kino Gas en Valle de Guadalupe donde cualquier ley o regla en materia ambiental fueron ignoradas y se menciona de forma insistente a este funcionario, otra vez.
Cabe destacar que si bien ha sido acusado una y otra y otra vez, ha sido señalado en muchas ocasiones por supuestos malos manejos y corruptelas no se le comprobado nada al menos no oficialmente, pese a una inhabilitación.
En este asunto sin embargo algo mas ocurrió porque la rapidez con que se interpone la denuncia se antoja mas para desviar la atención que para lograr realmente una restitución moral.
La denuncia es contra dos personas el reportero y el abogado pese a que casi todos los medios de comunicación locales transmitieron esta información algunos incluso antes que El Vigía, por lo cual ni siquiera podrían decir que el medio lo instigó.
La entrada de la nota es periodística y correcta ella puntualiza un supuesto que dice textual:
La pugna entre un particular y el gobierno municipal por la posesión de una vía pública, dejó al descubierto supuestos actos de corrupción en el XVII Ayuntamiento de Ensenada.
Acto seguido cita la fuente.
El abogado de la empresa Hielera de Ensenada, S. A. de C. V., localizada en la calle 12 y Riverol de esta ciudad, acusó al director de Desarrollo Urbano y Ecología, Rubén Ayub Martínez, de haberle pedido 50 mil pesos a cambio de no perturbar la actividad económica de la empresa.
Posiblemente el funcionario pueda acusar a la reportera que da el nombre del abogado de la empresa Alfonso Rocha Albertsen hasta el quinto párrafo, pero nunca juzga lo dicho por el abogado ni opina en la nota.
Un dato interesante que no maneja Rubén Ayub en su denuncia es que la misma reportera informó al Ayuntamiento de la denuncia para pedir una declaración al respecto, la que es incluida en el mismo periódico en otra de las páginas.
Conclusión:
Es la primera vez que alguien señala en el caso de Rubén Ayub de frente una cifra, 50 mil pesos, ojo no es cualquier persona, es un abogado, que antes fue presidente de Canaco Ensenada y sabía a lo que se expone con su dicho.
El litigio de Ayub quien lo va pagar, abogados propios o del Ayuntamiento.
La reportera si escribió bien su nota.
Se espera que sindicatura investigue la denuncia pública por intento de cohecho del que se acusa a Ayub al pedir presuntamente 50 mil pesos y que procuraduría haga lo suyo en el caso de la difamación.
P.D.
Que a Rubén Ayub lo acusen de corrupción, no es noticia.
Que Rubén Ayub acuse a alguien de difamación si es noticia, porque desvía el tema a otro plano, a lo que publicó la prensa, cuando el tema en realidad es la lana que pidió supuestamente y que alguien por primera vez le confirma a voz de cuello.