La semana anterior que Antonio García Herrera dijo que se lanzaría a buscar la Presidencia municipal, me provocó gracia por un lado y miedo por el otro, la facilidad con que una persona, sin una trayectoria brillante, por no decir mediocre, se creen que en serio tiene los atributos para convertirse en presidente municipal.
Sin embargo el encabezado del Vigía este sábado de plano me dejó petrificada, al enterarme que el locutor Enrique Larios también la quiere y no solo eso sino que cree que en serio puede convertirse en alcalde.
Si bien es cierto, el Alcalde actual no es precisamente político y mucho menos cuenta con otra serie de atributos que debía tener un presidente municipal, el que se haya sacado la lotería no quiere decir que ahora cualquiera puede comprar boleto.
El asunto me parece peligroso, porque así como están las cosas al interior de los partidos que ya no ocupan enemigos fuera porque los peores militan dentro, el panorama para la ciudad me parece francamente aterrador si varios de los que quieren la logran...
El PRI como nunca esta dividido, los grupos de poder aquellos que hicieron por décadas gala de su fortaleza están resquebrajados, muchos de sus antiguos militantes que se hicieron de privilegios y canonjías al amparo tricolor ahora son connotados panistas.
Los líderes que pudieran llegar y cuyos nombres se manejan para la contienda, como Loperena, enfrentan al interior el resentimiento de quienes en de la elección anterior no pueden perdonarle aún que su gente no apoyara a Hirata.
En el PAN en tanto, las fuerzas están mas divididas que nunca, porque si bien Cesar Mancillas es el que de manera natural se presume que pudiera ganar la interna del blanquiazul, en la realidad la situación es otra.
Hay dentro de ese partido, fuerzas radicales que no van a soltar así como así el poder que han logrado y no solo eso, sino que ya probaron la seguridad que da mamar de la ubre presupuestal y no piensan dejarla.
La repartición de los puestos públicos de la que han hecho gala los panistas en los últimos años ha sido similar a la que hicieron en sus mejores o peores tiempos los priístas de acuerdo a la óptica con que quiera verse y separarse del presupuesto no creo que este en el proyecto inmediato de muchos de estos ahora funcionarios públicos que como chapulines brincan de puesto en puesto a costillas del erario.
El grupo de Mancillas se enfrentará en la interna con Herrera apoyado por Catalán y su grupo que no creo que duden en lo mas mínimo, hacer cualquier cosa con tal de no soltarse de las ramas que están ahora agarrados y que les garantiza un sueldo seguro y privilegios que da el poder político.
En el PRD, la cosa esta mucho peor, dividido, debilitado, sin propuestas y sin ningún candidato a la vista en una Izquierda extraña que todo parece menos izquierda.
En el PT, esta Armando Reyes, mucho ruido y pocas nueces quien sería en ese partido el único conocido como para pelear por una candidatura, sin éxito como lo demostró en la de diputado donde sus votos reflejan sin duda la realidad de los seguidores que pudiera tener.
El Verde ecologista no existe y si existe a lo mejor vuelve a contar mentiras, le funcionó muy bien en la campaña anterior pero difícilmente podrían lograr mas de lo que lograron una vez.
Lo cierto en este asunto es que la caballada esta flaca, la ciudadanía harta y al menos que surja un líder, el próximo proceso electoral si tiene de candidatos a Larios, a Herrera y Armando Reyes, será un escenario tragicómico para nuestra ciudad.