La información no digitalizada y no resguardada apropiadamente en los archivos históricos de las ciudades se pierden irremediablemente y esa valiosa información desaparece de la memoria de sus habitantes, esto sucede por la indiferencia de nuestras autoridades gubernamentales al no invertir en un presupuesto razonable al valor histórico de los documentos, que son la comprobación de nuestros orígenes e identidad.

El 24 de marzo de 1982 prácticamente desapareció la Cineteca Nacional. Pérdidas materiales y documentos irrecuperables valuados en varias decenas de millones de pesos. El siniestro se inició debido a un corto circuito en la sala de revelado.

Cinco muertos y más de 50 heridos fue el resultado de este terrible suceso: sus explosiones fueron oídas a más de 5 kilómetros de distancia.

Para controlar el siniestro se requirieron más de 1,500 elementos entre personal de bomberos, policías, elementos de tránsito, elementos de alta montaña, bomberos forestales, personal médico del ISSSTE, Cruz Roja, y voluntarios.

En entrevista con el Universal el 25 de marzo de 1982 Margarita López Portillo, Directora de Radio, Televisión y Cinematografía dijo: ¨exigiré que se investiguen a fondo las causas este terrible suceso, no me explico porque construyeron el edificio de la Cineteca sobre la bodega donde se almacenan las películas de México y donde se guarda el nitrato de plata, el cual era una bomba de tiempo y se los advertí ¨. Subrayo ¨les advertí a las autoridades antes que se construyera el peligro y que se aislara el lugar donde se guardaban los tesoros fílmicos del cine mexicano, los documentos, y libros impresos¨. Manifestó que no podía calcular la cantidad de filmes y documentos consumidos por el fuego: todo México sufrirá por una pérdida irreparable. Nerviosa la directora insistía ¨Yo lo advertí en múltiples ocasiones y no me hicieron caso¨.

Esto me recuerda el Archivo Histórico de Ensenada, los archivo del Riviera, archivo del Registro Civil y los archivos del Ayuntamiento, de tantas dependencias y organizaciones. Ensenada no cuenta con un edificio que resguarde con seguridad todos estos documentos, película, archivos digitales, filminas, fotografías, diapositivas, etc.

Si el Gobierno Municipal se preocupara en rescatar el edificio del ex mercado público para profesionalmente conservar y dar certeza del buen resguardo del patrimonio histórico, los ciudadanos estaríamos más que orgullosos de donar nuestras colecciones privadas, pero sin certeza política y de continuidad esto no sucederá y la historia seguirá perdiendo con la muerte de sus propietarios.