Usted señor presidente dijo:

“Sí, los fifís fueron los que quemaron la casa de los Madero, los fifís fueron los que hicieron una celebración en las calles cuando asesinaron atrozmente a Gustavo Madero, cuando los militares lo sacrificaron, que es una de las cosas más horrendas y vergonzosas que ha pasado en la historia de nuestro país, salieron los fifís a las calles a celebrarlo y había toda una prensa que apoyaba esas posturas. Se usó para caracterizar a quienes se opusieron al presidente Francisco I. Madero tras la Revolución Mexicana. Sí, los fifís fueron los que quemaron la casa de los Madero, los fifís.

Imposible que hayan sido los fifís, no creo que Victoriano Huerta haya sido un Fifí, claramente fueron los soldados, la turba, que de ninguna manera eran vanidosos o de maneras refinadas y ricos.

Contraviniendo a la definición de fifí que da la Real Academia Española, usted da otra definición con el único propósito de ofender. Usted dice qué los fifís “Son fantoches, conservadores, sabelotodo, hipócritas, doble cara.

Creo que debería dejar de usar este término para denostar y ofender, no quiero recordar que de 2019 al 2024 un presidente de México es recordado por ser fifí. Usted queriendo reinventar la historia dice “los fifís fueron, soldados, asesinos, que asesinaron a Madero“, referencia totalmente inexacta.

Usted reclama disculpas al reino de España por la conquista de los pueblos indígenas, de sucesos de hace 500 años. Para tener calidad moral y solicitar perdón, no será mejor remontarnos en la línea del tiempo y que Usted solicitara perdón a los gobernadores que sus seguidores ofendieron, a los empresarios, productores, trabajadores e inversionistas por los daños económicos y morales, por el bloqueo de las vías férreas que por su omisión de actuar tuvieron pérdidas millonarias, (2019) que por su omisión están bloqueadas carreteras y sitios públicos. A sus ex compañeros del PRD por abandonarlos y en 1996, por bloquear usted vías férreas, instalaciones de PEMEX, por los plantones en el D.F. (CDMX) a los propietarios de comercio, habitantes, empresarios, inversionistas y trabajadores en 2006, sería a tantos a los que debería usted solicitar perdón, antes de llegar a 1521 año qué quiere usted que España pida perdón.

Señor Presidente Constitucional de México Andrés Manuel López Obrador, cambie su actitud... vuelva a ser humilde, respetuoso y honesto con usted mismo. Así le quiero recordar y no como un Presidente Fifí, déspota, ofensivo, agresivo, intolerante, incomprensible que proclama amor y paz dañando con su acción y omisión a los bienes y derechos de terceros. Su derecho termina donde empieza el mío.