Arturo Espinoza Jaramillo, Titular de la SIDURT en Baja California, detalló en conferencia de prensa que la tardanza para la entrega en el nodo vial El Gallo consiste principalmente en las modificaciones que se tuvieron que hacer al proyecto original en donde no se contemplaron actividades esenciales para la viabilidad de la obra.

Precisó que al momento de recibir el proyecto se les entregó una lista de actividades con cien puntos a cumplir, sin embargo, con las modificaciones dichas actividades se duplicaron a doscientas, por esta razón se tuvieron que extender los plazos de entrega y a su vez se elevaron los costos de ejecución.

“En el proyecto viejo no se consideró retirar la tubería vieja, en el nuevo se va a retirar toda la tubería que corre de manera paralela sobre la reforma en el tramo del puente para evitar fugas futuras que puedan poner en riesgo la estructura del puente” aseguró Espinoza Jaramillo.

Por otro lado, añadió que agregaron dos gazas más que permitirán descender el puente superior al puente intermedio para posteriormente poder salir del nodo vial en ambos lados de la Calle Esmeralda, dicha modificación significó un incremento de al menos 20 millones de pesos adicionales.

Declaró que hasta el momento con respecto a losas de concreto se ha concluido con la estructura del puente superior sobre reforma y faltan pocos metros para terminar la gaza Esmeralda hacía Reforma en el lado norte, por lo que posteriormente se cerrará la gaza que desvía el tráfico de norte a sur y de Reforma hacía Esmeralda para también ser pavimentada.

Cómo se informó con oportunidad a través de Ensenada Net, el proyecto original presentado por la administración estatal pasada, contemplaba una inversión total de 198 millones de pesos como máximo, sin embargo debido a todas las modificaciones el costo se ha elevado a los 240 millones de pesos, 42 millones más.

Espinoza Jaramillo, subrayó que es necesario siempre contar con un análisis de tuberías y anomalías que se pueden presentar en un proyecto con el fin de anticipar los problemas, sin embargo, en el caso del nodo vial El Gallo no se realizaron dichos estudios lo que provocó una ola de dificultades al momento de recibir la obra.

Añadió que por el momento los carriles exteriores de cada sentido permanecerán cerrados para concluir con la terminación de las banquetas y barandales metálicos en ambos extremos de la estructura, este jueves aún se ajustaban los detalles finales para hacer posible la circulación.

Conforme avancen las semanas se analizará el beneficio que aportó haber abierto el puente para devolver tanto a la Avenida Pedro Loyola como a la Calle Topacio a su circulación habitual de ambos sentido, ya que representa una complicación tanto para los habitantes de dichos espacios como para las operaciones comerciales, puntualizó.

Aseguró que los carriles cuentan con la capacidad suficiente para el tránsito de camiones de carga pesada, como para vehículos de cualquier tipo ya que cada espacio vehicular tiene una anchura de al menos 3 metros con 30 centímetro, mientras que la longitud del puente es la adecuada.

Cómo se informó con oportunidad el 7 de julio de 2021 se dio el banderazo oficial para arrancar con esta obra y durante la presentación del proyecto se afirmó que la entrega sería a finales del mes de enero del 2022.