El subsidio a las tarifas eléctricas que anualmente otorga el Gobierno Federal a los productores agrícolas de Baja California, a través del Programa Especial de Energía para el Campo, en materia de Energía Eléctrica de Uso Agrícola (PEUA) podrían superar este año, los $400 millones de pesos, destacó el Ingeniero Juan Manuel Martínez Núñez.
El Representante de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural en el Estado, informó destacó que de enero a agosto, se consumieron un total de 248 mil 311 megawats/hora, lo que generó un ahorro total por el orden de los $252.4 millones de pesos, en los primeros 8 meses del año.
Preciso que de continuar con esta tendencia, el subsidio de este año, podría ser superior a los ahorros generados durante el ejercicio fiscal 2022, cuando se lograron economías por alrededor de los $352 millones de pesos.
Comentó que actualmente, el padrón del Programa está conformado por 2 mil 565 usuarios, la mayoría de ellos, un 70% se ubica en el Distrito de Desarrollo Rural 001, Zona Costa (DDR 001), sobre todo, en las áreas agrícolas de los Municipios de Ensenada y San Quintín; mientras que el restante 30% se localiza en el Distrito de Desarrollo Rural 002, Río Colorado –Valle de Mexicali-.
El funcionario aclaró que el PEUA, es aprovechado para el bombeo y rebombeo de agua para uso agrícola, mediante la utilización de las Tarifas eléctricas 9N (nocturna) y 9CU (diurna), que tienen un costo de $0.34 y $0.67 pesos por kilowatt/hora, respectivamente.
Comentó que debido al costo preferencial que tienen dichas tarifas, éstas son utilizadas por los agricultores de Ensenada, específicamente del Valle de Guadalupe y los Ejidos El Porvenir, San Vicente y Ojos Negros, para la plantación de vid y hortalizas, mientras que en San Quintín, son aprovechadas para la producción de berries y hortalizas como el tomate, cebolla, chiles y algunas coles como el repollo y el col de Bruselas, principalmente.
El PEUA puede generar ahorros económicos que van del 70% al 85% en el costo de la energía, lo que repercute positivamente en sus costos de producción. "Si el productor no estuviera inscrito en el Programa de Energía para el Campo, el costo promedio por kilowatts, le pudiera llegar a costar $2.20 pesos, lo que le representaría un gasto significativo al final de la cosecha", aseguró.